Asado íntimo en un country para “levantarle el ánimo” a Milani

Cuando la Presidenta lo puso al frente del Ejército, el general César Milani soñaba con otro presente. Ya está imputado por enriquecimiento ilícito (el juez ordenaría medidas de prueba en la próximas horas) y hay varias causas judiciales en marcha por su confusa actuación durante la dictadura. El respaldo presidencial por ahora lo sostiene en su cargo. Pero el frente interno sigue acechando. El sábado a la noche, Milani recibió el apoyo de algunos de sus amigos más íntimos. Fue un asado en su honor. El evento, pudo saber Clarín, tuvo lugar en el country San Jorge Village, ubicado en Los Polvorines, a unos 30 kilómetros de la Capital Federal. Ahí vive un amigo que compartió con él los primeros años en el Ejército y luego se retiró muy joven. Milani concurrió junto a su mujer, ahora también investigada por la Justicia a raíz del supuesto enriquecimiento ilícito de su marido. Fue una cena íntima. Apenas una docena de invitados. Igualmente, el anfitrión decidió contratar un asador de la zona para poder disfrutar la cena. “La idea era levantarle el ánimo por todo lo que está pasando”, contó uno de los comensales. Según esa misma fuente, son “injustas” las acusaciones sobre su desempeño durante la dictadura. “Cuando pasó lo de Ledo, el general (Milani) tenía 22 años, a esa edad nadie tomaba decisiones, solo cumplía órdenes”, dijo uno de sus camaradas. La causa judicial por la desaparición del conscripto Alberto Agapito Ledo había sido archivada pero ahora el fiscal ad hoc Pablo Camuña citó a declarar a dos testigos relacionados con el hecho, ocurrido en junio de 1976. Ledo y Milani se hallaban en ese momento en Tucumán como integrantes del Batallón de Ingenieros en Construcciones 141 de La Rioja, durante la Operación Independencia.