Coto, imputado por un arsenal encontrado en uno de sus super

El empresario Alfredo Coto y su hijo quedaron imputados por tenencia irregular de armas. Cuál fue el rol en la investigación del fiscal Jorge Di Lello. Más detalles.

¿Qué hacía un arsenal de armas en un supermercado Coto de Caballito? Esta es la increíble pregunta que ahora el legendario empresario supermercadista debe contestar.

La historia comienza con un anónimo del 5 de setiembre del año pasado. El mismo le llega al fiscal Jorge Di Lello , donde se detallaba que la autoridad de aplicación de control de armas había hecho al vista gorda al inspeccionar un arsenal de armas oculto en un deposito del super Coto de Caballito, ubicado en la calle Paysandú.

La Justicia vuelve al lugar y detecta entonces más de 200 granadas, 41 proyectiles de gases lacrimógenos, 27 armas de fuego, gas pimienta y un silenciador de armas, entre otras armas.

Interviene en el hallazgo la fiscal federal Paloma Ochoa quien imputó por tenencia irregular de armas de guerra al empresario Alfredo Coto, a su hijo (Germán), y a funcionarios de la Agencia Nacional de Materiales Controlados (ANMaC, ex RENAR), por irregularidades en el control.

La empresa guarda silencio al igual que muchos medios que la tienen como anunciante. Sin embargo, COTO sacaría en las próximas horas un comunicado tratando de explicar la insólita situación de haber tenido un arsenal de armas en una de sus sedes que además estaba debajo de un pelotero de niños.

El arsenal incluía armas con pedido de secuestro y algunas cuyo número de serie había sido limado.

Según cuentan fuentes extraoficiales, COTO, y su organización, temían saqueos de fin de año en varias de sus sedes y a través de la empresa de seguridad privada que lo custodia se había abastecido de estas armas.

Por otro lado, quedó en el centro de la tormenta la titular del ex RENAR, la ex sciolista Natalia Gambaro, quien mantiene una dura interna con sectores del macrismo puro.

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