La Justicia dictaminó a favor del humor político de la revista Barcelona

El medio había sido condenado a pagarle una indemnización a Cecilia Pando. El procurador fiscal ante la Corte dijo ahora que no hubo exceso en el ejercicio de la libertad de expresión.

El procurador fiscal ante la Corte Suprema, Víctor Abramovich, dictaminó que un fotomontaje realizado por la revista Barcelona sobre Cecilia Pando se encuentra amparado por el derecho a la libertad de expresión y que no excede el alcance de una opinión sobre un asunto de interés público.

El caso se inició a raíz de una contratapa de la revista. En el fotomontaje se veía un cuerpo atado con sogas con el rostro de Pando, y en la que se hacía referencia a lo ocurrido en el año 2010, cuando las mujeres y familiares de militares presos por causas en las que se investigan crímenes de lesa humanidad se encadenaron a las rejas del Edificio Libertador y del Ministerio de Defensa.

Pando demandó a la empresa que edita la revista Barcelona y conseguir una condena en primera y segunda instancia. La Cámara de Apelaciones en lo Civil confirmó la condena a pagar 60 mil pesos en concepto de indemnización por los daños y perjuicios. Contra esa decisión, la demandada interpuso un recurso extraordinario ante la Corte Suprema.

Al entender en la cuestión, el procurador fiscal Abramovich caracterizó al evento como un asunto de interés público. Asimismo, sostuvo que el margen de tolerancia de la actora frente a la crítica periodística debe ser mayor debido a su carácter de figura pública. En tal sentido, señaló que, además de ser la presidenta de la Asociación de Familiares y Amigos de los Presos Políticos de Argentina, Cecilia Pando intervino en numerosas ocasiones en la esfera pública, que generaron discusiones en la sociedad sobre el enjuiciamiento de militares y el papel de las autoridades políticas y castrenses en esos procesos, y que las expresiones aquí cuestionadas se refieren, precisamente, a una de esas intervenciones.

En relación con el medio condenado, según publicó el sitio Fiscales, el representante del Ministerio Público Fiscal sostuvo que la entidad del agravio debe ponderarse partiendo del carácter satírico e inverosímil de la revista Barcelona, ya que “ningún lector de ese medio podía razonablemente considerar que lo que se transmitía era información verdadera o creíble acerca de la actora, su vida íntima o su imagen”.