Macri apuesta al fútbol para despejar las tensiones con Evo Morales

Ya hablaron por teléfono y acordaron de palabra cuándo vendrá a la Argentina. Los planes.

Tras las quejas de Evo Morales como de otros dirigentes bolivianos por el DNU de control migratorio que firmó Macri, el propio Presidente argentino llamó a última hora de ayer a su par y le dijo que lo espera a mediados de abril en nuestro país, en un intento de aliviar tensiones y mejorar la relación.

Las diferencias ideológicas entre ambos son notorias, por eso la apuesta de Mauricio Macri es explotar eso que tanto comparte con Evo, que es la pasión por el fútbol. La fecha en que vendría al país no es indiferente: para el 16 de abril, si no sucede nada raro en la siempre convulsionada AFA, Boca y River se estarán enfrentando en La Bombonera y ahí irían los dos juntos.

Por otro lado, también habrá un partido de fútbol entre un conjunto armado por Macri y otro por Evo. Tal como lo hicieron hace un par de años, o lo hizo el propio Evo cuando jugó con Daniel Scioli durante la campaña electoral de 2015. Dos eventos a los que Evo no puede decir que no.

Ayer, tras el llamado, algo comenzó a recomponerse tras aquellas duras palabras en respuesta al DNU. Ahora, de no mediar ningún problema, será el fútbol quien termine de recomponer una relación bilateral importante en la región.

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