Preocupa a Cambiemos las charlas en el Congreso de Massa, Rossi y Bossio

Creen que es el principio de una reorganización del peronismo para hacerles imposible la gobernabilidad. Pichetto cambió a actitud.

El Congreso será escenario de un país trabado y envuelto por las dudas económicas. Las dos Cámaras están complicadas para sesionar pero peor y en un clima muy combativo se conforma diputados. En la última semana, trascendieron encuentros entre tres actores principales en esta instancia de confusión peronista : Sergio Massa , Agustín Rossi y Diego Bossio cada vez se entienden mejor y acumulan motivaciones comunes que superan las dos eses que contienen sus apellidos.

Para el gobierno esto es una pésima noticia política. Sobre Rossi no se esperaba ningún. tipo de colaboración ya que está recostado en las alas protectoras de Cristina . Sin embargo, Massa y sobre todo Bossio se contaban como votos posibles ante reformas que todavía están en veremos.

Es indudable que para el oficialismo todo cambió desde el tumultuoso debate, que ganó con altísimo costo, de la reforma previsional. Ahora, un termómetro justo de lo que le queda por venir en la relación con la oposición peronista lo dará el debate del decreto de reforma administrativa que estipula la simplificación de normas, pero que el senador Pichetto calificó como “un poco mucho”, ya que entiende que “avanzaron sobre áreas y temas que comprenden las reformas de 129 leyes”.

El peronismo juntado, intentará en una sesión especial derogar este decreto de Macri. De concretarse este escenario sería la derrota política más dura desde que Cambiemos gobierna.

Pichetto le dijo por teléfono a Pinedo que “no hará ningún esfuerzo para frenar esta embestida. A el síndrome de abstinencia de poder que padece el peronismo hay que agregarle un mal comienzo del año del gobierno que no pudo frenar la inflación, tiene malas señales externas y el dólar sigue su carrera alcista.

El área de Comodoro Py quedó restringida a el aplauso de un segmento chico de argentinos que sigue manchando la parada del cambio. En tanto, los achiques y gestos del oficialismo con medidas restrictivas para familiares de funcionarios quedó diminuto ante el gasto ineficaz de la política.

La imagen del presidente sigue bajando, Está a 40 puntos y cruzada con sus aliados Vidal y Larreta pelea el tercer puesto. Nada que no se pueda revertir, EL tema es llegar con fuerzas al Mundial de Rusia.