Juró Cristina: qué le espera en el Senado

La ex presidenta juró como senadora y ya piensa en lo que viene. Detalles de una sesión que contó con un faltazo clave.

Cristina Fernández de Kirchner juró como senadora de la Nación en una Sesión Especial que tuvo algunos detalles de color. La ex presidenta ahora compartirá la Cámara Alta con dos ex presidentes y un histórico enemigo.

Junto a CFK juraron Carlos Menem y Adolfo Rodríguez Saá, los otros dos ex jefes de Estado que tendrá el Senado. El primero de ellos busca refugio de la justicia, mientras que el segundo revirtió la elección tras perder por 20 puntos en las PASO y seguirá como legislador.

La ex presidente llegó pasada las 10 al Senado acompañada de los dirigentes más fieles. Héctor y Mariano Recalde, Mayra Mendoza y el Cuervo Larroque, entre otros, estuvieron dentro del Palacio. Afuera, varios militantes cantaron “Cristina senadora”, aunque ella había pedido que no la acompañaran. Se volvieron a ver remeras de La Cámpora por las calles aledañas al Congreso, como en las viejas épocas.

Tal como adelantó ExpedientePolitico, hubo un altercado con una supuesta hermana de Cristina que quiso entrar al Senado, pero no pasó a mayores. A diferencia del resto de los senadores, CFK juró sola y para sorpresa de muchos no lo hizo “por él”. Esteban Bullrich y Carlos Menem, entre otros, juraron con la compañía de su familia. El ex presidente lo hizo con su hija Zulema y dos de sus nietos.

La nota del día la dio Gladys Gonzalez, senadora electa por Cambiemos, que faltó a la sesión por estar de viaje en China. Lo hará luego del 10 de diciembre, día en que asuman los nuevos senadores.

Ya con despacho, Cristina tendrá un viejo enemigo en la bancada de Cambiemos: Eduardo Costa, marido de Mariana Zuvik. La pareja sureña enfrenta a los Kirchner desde la década del 90 y han hecho infinidad de denuncias. La relación es pésima.

Sin embargo, el verdadero rival para CFK será Miguel Ángel Pichetto. El líder del PJ ya le avisó que hará un bloque sin ella para negociar directamente con el Gobierno. Si bien Cristina será senadora por tercera vez, tendrá el recinto más complicado comparado a sus otras oportunidades.