La guerra de la pelota

La foto de Gustavo López junto a Bebote Alvarez, en la fiesta de Independiente, fue el disparador. Gabriel Anello recogió el guante, se relamió y apuntó con artillería pesada. Y lo acusó de apañar a los barras del Rojo. Enseguida llegó la respuesta de  López. Primero criticó al diario Clarín porque consideró que lo escrachó con esa foto con Bebote. “En 20 años de carrera, mi primera foto en el diario es esa. Y miren que hice muchas cosas“, argumentó el periodista de la Red. Despues apuntó directo a su colega:

“Sé porque me atacas. Estoy en el lugar que querrías estar vos. Tengo dos tiras diarias en la Red, y soy el conductor del Show del Fútbol. Sangrás por la herida”, dijo López en su programa del domingo por la noche.

Atrás, había quedado un ida y vuelta de Tweets, con la mediación como excusa. “Todo el día hablás de mí. Sos el líder de los boludos”, escribió Anello. “Quiere todo lo que tengo, pero eso tanto odio”, respondíó López. Y hubo más.

“Es un perdedor”, acusó Anello, y López le retrucó que “cuando enciende el micrófono, la radio baja 10 puntos. Paga para trabajar”.  El domingo, coincidieron en el Monumental, en el partido entre River y Olimpo. Pero no se cruzaron. Que haya paz.