A Scioli le sacaron la anaranjada

Anaranjada sí. Roja, por ahora no. Dificilmente, el ultra kirchnerismo pueda inventar, a esta altura, un candidato “puro” con chances de ganar. La jugada de Scioli de visitar en Mar del Plata el stand de Clarín fue un gesto de independencia, dentro de los carriles que se mueve en su estilo no rupturista. A los propios sorprendió, y dejó en un plano de interrogantes cómo seguirá

su campaña. La fractura puede favorecer, en principio, las candidaturas de Massa y Macri, que están un poco abajo de Scioli. Igual, la sangre no llegará al río porque ambos sectores del oficialismo se siguen necesitando.

El gobernador Naranja es el mejor posicionado y el que puede garantizar una ventaja holgada en primera vuelta. Un dato no casual es que Cristina detuvo su furia y no la propagó en su cuenta de Twitter, donde en una nueva ráfaga prefirió pegarle a “Radio Buitre”.