Lazaro Báez tiene 65 armas y le archivaron una causa en Santa Cruz

La denuncia sobre la existencia de bóvedas en una de las estancias de Lázaro Báez, que se conoció en la edición del programa Periodismo Para Todos (PPT) del 14 de abril del año pasado, terminó dando inicio a dos causas judiciales. La Cámara Federal decidió, en junio de ese año, enviar a Santa Cruz la investigación sobre las fotos que mostraban valijas con armas y municiones, y le cedió –llamativamente– al juez federal porteño Sebastián Casanello la denuncia sobre la supuesta existencia de bóvedas que habrían sido desmanteladas a toda velocidad después de que se divulgaran las primeras denuncias sobre “la ruta del dinero K”.

En tiempo récord, el 16 de septiembre del año pasado, la jueza federal de Río Gallegos Andrea Askenazi Vera archivó la denuncia referida a las armas. En la resolución, a la que accedió Clarín, se destaca que durante la investigación se registró la estancia y se tomó declaración a las personas que habrían visto las fotografías de los bultos y paquetes con las armas. Además se menciona un informe del Registro Nacional de Armas, donde surge que Lázaro Baez está inscripto como legítimo usuario de armas de fuego, con credencial número 5.308.578, que vence el 2 de junio de 2018. En ese informe también consta que Martín y Leandro Báez están inscriptos en el Renar y que tienen carnet vigente. En total, tienen un arsenal compuesto por 65 armas.

La resolución de la jueza federal de Santa Cruz, de apenas dos carillas, fue notificada al juez Casanello en octubre del año pasado.

La causa se había abierto por una supuesta infracción al artículo 189 del Código Penal, que reprime “el acopio de armas de fuego sin la debida autorización”. La magistrada se amparó en un dictamen de la fiscal subrogante, quien consideró que “de los elementos de prueba colectados no surgen indicios que hagan presumir la comisión del delito investigado”.

En tanto, la causa por las supuesta bóveda sigue abierta, pero hasta ahora no tuvo muchos avances. “Los peritos de Gendarmería no pueden afirmar que la pintura de lo que ahora es una bodega sea reciente”, dijo una fuente judicial. Horacio Quiroga, un ex gerente de la petrolera de Báez, también ayudó al empresario kirchnerista, y aseguró que había conocido la supuesta bodega que él le mostró a los periodistas para negar que allí hubiese habido una bóveda.