Cristina lanzó en Mar del Plata su cara de líder “humilde”

Cristina Kirchner eligió nuevamente otra postal para hacer su lanzamiento de campaña. Tal como ocurrió en la cancha de Arsenal de Sarandí, en Mar del Plata el acto tuvo cosas muy diferentes a las que el kirchnerismo acostumbraba. Los protagonistas excluyentes fueron marplatenses “comunes” desplazados por el modelo Macri.

Música rockanrolera y Ella apareciendo desde atrás con una lluvia de papelitos , abrazos y besos, Otra vez la estética similar a los productos de Jaime Durand Barba.

Los vecinos y miembros de Pymes de la ciudad feliz manifestaron sus pesares económicos entre cierres de comercios y caída de consumo.

Scioli, quinto en la lista, el mismo que solía gastar fortunas en recitales veraniegos asentía desde el fondo. Ella se mostró humilde y cediendo la palabra.

El lanzamiento en el Teatro Roxy tuvo lugar solo para los ex funcionarios y candidatos que mostraran su pulsera azul. Con capacidad para 1500 personas, en el mítico teatro no entraron militantes. Estos se quedaron afuera con banderas, gorros y unas remeras con la cara de Cristina, que se vendían a 150 pesos.

También, a las afueras del teatro, hubo pines con el logo de Unidad Ciudadana y la cara de la ex presidenta. Allí para que la militancia siga el acto se instaló una pantalla enorme que siguió el discurso minuto a minuto.

Los medios también la vieron de afuera y la prioridad la tuvo el propio equipo de comunicación de Unidad Ciudadana, que transmitió en vivo por Youtube. Todo al ritmo de la locutora militante, que criticó al Gobierno y elogió a CFK.

Casi como en un acto del PRO, no hubo lugar para canciones militantes: salvo el “vamos a volver”, después sonó Gilda y Los Piojos, entre otros artistas. Primero subieron los postulantes bonaerenses y luego lo hizo la ex Presidenta, que ingresó entre medio de todos casi como una estrella de rock.

Cristina cerró hablando con tono quebradizo. Pidió ser escuchada y votada para “defender a los ciudadanos”.