De la docente dogmática de La Matanza a Milei: un mismo eco de violencia

Ambos discursos intentan penetrar cabezas de jóvenes, primeros votantes. Qué tienen en común.

“Zurdo de m…”, “gusano arrastrado” y “pelado asqueroso”, son algunos de los epítetos que desparramó Javier Milei en su última intervención de campaña al referirse a Rodriguez Larreta.

“Te crees que porque tiene ojitos celestes no te va a robar, te robó !!!, te robó el futuro”, dijo a los gritos la docente de La Matanza bajando línea a un alumno.

Los dos discursos tienen un mismo destinatario. jóvenes de 16 años, primeros votantes, que hacen preguntas más que buscar una única respuesta cerrada. Que este sea el eco mágico de la campaña habla de una sociedad enferma por la intolerancia.

La diferencia entre ambos casos es que de la clase dogmática de la maestra matancera hay repudios generalizados, mientras que sobre el libertario, que reúne cada vez más gente en actos de campaña, su frasco tiene ritmo standapero, simpático y rockero.

Los dos casos utilizan los gritos para comunicarse, y un cumulo de adjetivos despectivos hacia el que piensa diferente.

Laura Redetich respondió a un lógica militante olvidando su rol de habilitar en las clases el pensamiento crítico. Pero, en ella no hay una estrategia ni una diputación en juego.  Naturalizar estos esperpentos puede llegar a ser la última batalla perdida.