De los Machos del Off a la Jefa aturdida

La frase “los machos del off” había sido utilizada en 2014 por el entonces vicepresidente Amado Boudou, que acusó a integrantes del Gobierno de Cristina de operar en su contra, en la causa Ciccone. Luego fue recogida por otros que la hicieron propia en diferentes momentos de internismo k. Lo cierto es que el off the record, tan estudiado en las escuelas de periodismo, es una herramienta que como tal puede ser bien o mal utilizada. Para el periodista es una forma de alcanzar datos exclusivos o análisis de primera mano de protagonistas que piden confidencialidad.

En la otra orilla, los políticos que hace uso y abuso de este insumo atractivo lo hacen muchas veces con la idea de perjudicar a otro colega, muchas veces del mismo color político en la carrera desenfrenada por el poder. Sea cual fuera el motivo , siempre lo importante de un off es que sea verdad lo que se cuenta. La verdad  es algo complicado en el kirchnerismo dado que su staff adhiere a la teoría de la post verdad, es decir las cosas adquieren sentido de acuerdo a la connotación o la autopercepción que se tenga de ellas.

Cristina descree de la intermediación de la prensa sobre los acontecimientos, por eso se pasa gran parte de su vida política discutiendo títulos de diarios , enfoques periodísticos y fustiga con furia a aquellos dirigentes que osa hablar con periodistas. Ella también habla con un grupo selecto de miembros de la comunicación que hacen de escuchas y militan la admiración hacia la Jefa.

En su nueva aparición pública, siempre controladas, la vice presidenta se quejó con sorna de aquellos que dicen “barbaridades que después se niegan”. Más temprano , Alberto instruyó a su portavoz, Gabriela Cerruti a que saliera al cruce de la versión de una charla entre él y Roberto Navarro , por la que el periodista k concluyó que el presidente se sentía un instrumento bisagra para terminar con 20 años de kirchnerismo. La nota de navarro pone entrecomillados en las supuestas frases del presidente. Otro escalón para darle veracidad a su publicación.

“Vamos a una PASO, por ejemplo, con Coqui Capitanich. Si él le gana al presidente sale tan fortalecido que es un gran candidato para llegar a la presidencia. Si yo le gano, como Coqui será el candidato de Cristina, seré el que terminé con 20 años de kirchnerismo y puedo ganar las elecciones. Lo mismo si les gana Scioli u otro candidato del espacio”, escribió Navarro sobre declaraciones adjudicadas al presidente.

La mayoría de los contenidos, en base a los off, son intangibles como la política misma , ya que se basan en ideas o impresiones. Si realmente el dueño de El Destape habló con Alberto, y este se proyectó como una suerte de partero de una nueva historia dentro del peronismo, ¿qué duda cabe en que se está asistiendo a una interna palaciega de dos protagonistas de la máxima cúspide institucional que no se hablan hace meses? Eso es claramente no ficción.

El Cuervo Larroque, para poner solo un protagonista del culebrón veraniego, manifestó sin medias tintas que le parecía “surrealista” la intención reeleccionista del primer mandatario. Cristina es coherente en una cosa , ella dice todo lo que piensa en forma descarnada, sincera y sin medir consecuencias. Como Shakira pasa facturas, aunque su nivel de responsabilidad en el proyecto gobernante la ubica difícilmente en un rol de víctima de esta historia. La verdadera proscripción de Cristina son las trampas que ella misma provocó al enviar a la casa Rosada a un ex agente de seguros.

Horacio Caride