Desafuero a Cristina: Bonadío logró unir lo que ya estaba languideciendo

El peronismo no k se abroqueló para evitar que la ex presidenta vaya presa. Polémica sobre el fallo.

Cristina ya era ayer y de repente un fallo la volvió a ubicar en el centro de la escena. Muchas versiones: una que el gobierno motorizó la embestida, otra que en realidad todo responde a un interna del peronismo, y las más cercana que el polémico juez tiene una inquina personal contra la ex presidenta, que encontró el espacio para recuperar protagonismo y victimizarse.

La noticia fue una bomba en la ínfula corajuda de Cambiemos que iba por todo antes de fin de año, y tendrá serios inconvenientes para cristalizar todas las reformas enviadas al Parlamento.

El nuevo Congreso tiene voces de alto voltaje político. Entre ellas la ex presidenta que sintió que el mensaje en la botella de Comodoro Py es para silenciarla.

Bonadio seguía la causa como un Prode, donde jugaba fichas, con eventuales visitantes en su despacho que buscaban saber cuándo sería el día D.

Su elección por el jueves 7 de diciembre, tras la jura de la acusada de traidora a la patria, llama la atención, al menos en el manejo de los tiempos.

Piccheto ratificó su defensa a la doctrina que ningún legislador puede ser desaforado si no hay sentencia firme. Su separación de roles, entre el adversario de Ella y el rol institucional, no queda claro si es el de un hombre responsable o el de un tiempista.

Los votos para el desafuero no están y el proceso de discusión llevaría 6 meses de mínima. Demasiado plazo para las novedades de este país.

Horas antes del impacto judicial, el bloque peronista cristalizaba una fractura importante que era mensurada como una victoria para la Rosada.

El efecto “Cristina detenida” dejó en paréntesis el cotillón. Las reformas económica no serán un trámite, ni en la calle ni tampoco en el debate de los recintos.

Las Cámaras contaminadas en la Grieta podrían llegar a estar paralizadas para los asuntos de estado. Sabiendo que igual hay un sector amplio de la sociedad que festeja el difícil momento de la ex mandataria, voceros del gobierno tampoco se atreven a descalificar al magistrado. “Nadie tiene coronita”, dijo el Jefe de Gabinete.

Tomar una decisión trascendental, en la previa de un fin de semana largo, permite enfriar los efectos hasta el próximo lunes. Cristina decidió no apelar la medida de Bonadío, entendiendo que su carta fuerte está en los foros internacionales.

Si Milagro Sala recogió simpatías, ¿cómo no tendrá mayores apoyos ,quien fue una de las voces cantantes del Relato de la neo izquierda latinoamericana“. Sus amigos, Lula y Dilma Rousseff, ya le hacen el aguante.

Cuando Cristina conformó Unidad Ciudadana, en la última campaña política, ya había roto lanzas con sus compañeros de partido. Se habla de vuelta de un armado de centro izquierda para enfrentar a Macri.

El líder de la izquierda, Nicolás del Caño puso su rúbrica a ligar el fallo de Bonadío con una persecución.

Argentina navega en el desencuentro pero atraviesa una recomposición de sus sistema político. Se podría resumir en que el derrame del radicalismo es por derecha y se fusiona en Cambiemos, mientas que la sangría del peronismo se tiñe de rojo, como una suerte de Podemos español. Otro bipartidismo, a través de un sistema de alianzas se va gestando.

En tanto, los jueces hacen su propio partido. El más poderoso ante el desacople de los demás poderes. Bonadío clavó el puñal y dicen que ahora prepara su jubilación. Continuará…