Discusiones cruzadas por la no jura de Torello

José Torello estaba perfumado, implacable, para decir “sí juro”. Debía ocupar la banca de Esteban Burllich, quien renunció para dedicarle tiempo a su enfermedad. Sin embargo, desde la conducción del interbloque de Juntos le pidieron que no lo hiciera. Cristina y el oficialismo estaban dispuestos a la ceremonia. ¿Qué pasó?

En el fragor de la polémica por el quórum y el tiempo de espera reglamentario, algunos interpretaron que la jura de Torello iba a avalar una sesión que consideran nula por la más de media hora que tardó el quórum de Cristina, ayudada por una ex aliada del PRO.

El ex Cardenal Newman, amigo personal de Macri, rezongó en privado ya que le pareció una pérdida de tiempo postergar su jura, debido a la paridad extrema que tiene la Cámara Alta. Además, Torello pretende ser una voz fuerte del macrismo en la estrategia de las discusiones jurídicas.

En el kirchnerismo lo tiene apuntado, y lo esperan. Ayer, saltó el debate de Bienes personales y el escándalo de la filmación de la mesa política de Vidal con ex integrantes de la AFI, donde el entonces ministro de Trabajo, Marcelo Villegas  dijo lo de “me gustaría tener una Gestapo” para perseguir sindicalistas. ¿En qué entraría Torello en este asunto? Creen que fue el armador de esa reunión y del LawFare.

Muy claramente, la banca que pertenecía a Esteban Burllich, santificada por su condición, tendrá remolinos de viento en manos de un incondicional de Mauricio.