El caso Freiler envalentonó al Gobierno y ahora va por la Procuradora y otros jueces

Pese a las críticas por el método utilizado, una avivada política con rasgos kirchneristas, la suspensión del camarista Eduardo Freiler entusiasmó al Gobierno, que ahora va por otros jueces cuestionados en el Consejo de la Magistratura y por la procuradora Alejandra Gils Carbó.

En este último caso, no le será nada fácil. El Gobierno ya fracasó en varios intentos, por las buenas y por las malas. Hace tiempo que los hombres que manejan los temas judiciales de Cambiemos vienen diciendo que después de octubre avanzarán nuevamente contra Gils Carbó, a la que acusaron una y otra vez de favorecer al kirchnerismo. Pero los resultados de las PASO podrían acelerar los tiempos.

Por lo pronto, el 31 de agosto, la Procuradora debe presentarse en indagatoria ante el juez Ercolini por la famosa compra de un edificio. Esa causa seguramente avanzará hasta un procesamiento. ¿Alcanzará para desplazarla? Ella ya dijo que no se va de ninguna manera.

Quienes manejan la estrategia creen que la solución vendría por el lado del Congreso. Todavía hay mucha bronca con Elisa Carrió porque bloqueó en su momento la posibilidad de reformar la ley de Ministerio Público. Nadie se anima a decirlo, pero no se lo perdonan.

Candidatos para reemplazar a Gils Carbó sobran. Jueces y fiscales de Comodoro Py se anotan en esa lista. La mayoría no quieren que su nombre salga en los diarios para no “quemarse”.

La suspensión de Freiler, que sigue despotricando en varios medios, activó otros procesos en el Consejo de la Magistratura. Se habla de Daniel Rafecas, otro apuntado por el Gobierno, aunque ahora el oficialismo necesitará del voto del senador Mario Pais, que juró esta semana. Ese voto tiene nombre y apellido: Miguel Angel Pichetto.

¿Qué pasa con los demás jueces federales?. Canicoba Corral salió de la lista negra con varias acciones, especialmente el sobreseimiento de Gustavo Arribas, el titular de la AFI. Los demás por ahora sobreviven.