El caso Gilligan llegó a River

El escándalo de Valentín Díaz Gilligan atravesó la política y se insertó en el fútbol. Más precisamente en el mundo River. Es que la Comisión Fiscalizadora le solicitó al presidente D’Onofrio que lo echen del club. Por lo tanto, su puesto de vocal está en la cornisa.

En los pasillos del Monumental se comenta que Díaz Gilligan es un soldado de Jorge Brito, actual vicepresidente y candidato a reemplazar a D’Onofrio en las próximas elecciones.

Horacio Roncagliolo, un histórico dirigente, se sumó al pedido y pidió la renuncia de Pérez Gilligan, vocal oficialista, en las redes sociales: “¿Ya renunció“, se pregunta. Roncagliolo es el titular de la Fiscalizadora y el que promovió la movida.

Inclusive se asoció a Pérez Gilligan a un conocido empresario uruguayo, Paco Casal, y muchos dicen que el ex subsecretario general de la Nación estaba involucrado en el pase de futbolistas.

Eso sí, en River se agarraron la cabeza. Porque Enzo Francescoli es socio de Casal y Pérez Gilligan es la mano derecha del empresario uruguayo. El temor es que este escándalo salpique a más de uno…