El Dipy dice que le ganó el “rating” a Alberto Fernández, pero le falló la calculadora

Hizo un streaming de música. Cuántos seguidores reunió y cuánta gente vio a Alberto en C5N.

El presidente Alberto Fernández fue el invitado sorpresa de Sobredosis de TV el sábado por la noche. Casi a la misma hora, David Adrián Martínez, más conocido como “El Dipy”, comenzó su streaming de música.

Para su sorpresa, “El Dipy” fue furor en las redes sociales. Tanto que se animó a comparar su “rating” con el de Fernández. “Alberto Fernández en C5N con publicidad: 44 mil espectadores / #DipyFest en Twitter sin publicidad: 69 mil espectadores”.

Un fanático lo corrijió al avisarle que en un momento llegó a tener 130 mil personas al mismo tiempo escuchando su música. Eso sí: “El Dipy” no tuvo en cuenta que Sobredosis de TV alcanzó a medir 5,2 de rating y lideró los canales en la televisión.

El cantante de cumbia villera cobró protagonismo en los últimos días por criticar la cuarentena extra large y la política económica del peronismo en general y del albertismo/cristinismo en particular. Tanto que llegó a la #mesaza de Juanita Viale y luego tuvo un cruce muy comentado con Diego Brancatelli.

No solo eso: propuso que los funcionarios se bajen el sueldo como un gesto hacia los contribuyentes, a los que desde el Gobierno y buena parte del Congreso les piden quedarse en las casas para evitar brotes de coronavirus en la Argentina.

El cantante aclaró que no votó ni militó por el macrismo, tras las críticas que recibió en las redes sociales. De hecho, su discurso es más de la anti política. El Dipy repite que solo cree en él, en su familia y en su música.

Con un mensaje transversal hacia todas las capas sociales e ideológicas, “El Dipy” fortaleció la fama que ya tenía. Y, de paso, le dio pelea desde el rating al Gobierno.

La de Alberto, por su parte, no fue la mejor entrevista: en C5N dijo que el domingo almorzaría con “gente querida” en la Quinta de Olivos. No tardaron en pegarle en las redes sociales por incumplir la cuarentena que él mismo exige cumplir a los demás.