El Gobierno espera que pase el tsunami para retomar la estrategia electoral

Los hombres del presidente admiten el momento crítico. Pero creen que después del Mundial todo será “mejor”.

Los timbreos permanentes sufrirán una merma o parálisis. No hay clima para eso. En el seno del Gobierno debaten si el cambio de humor es solo del círculo rojo (aquél que le causa tanto recelo a Macri) o llegó al espíritu de la calle.

El mero clima de poder atacó rapidamente los despachos. Generalmente ocurrió en otros gobiernos en la reelección, o ya culminando sus primeros mandatos,

Las encuestas lo marcan, sin importar el color. La imagen del presidente sigue bajando y contagia a sus otros pilares, sobre todo a la gobernadora.

Antes de la suba sostenida del dólar, los estrategas del 2019 ya se estaba preparando el ropaje de armado del casting de candidatos en todo el territorio nacional.

Al radicalismo, de la mano de Cornejo, le vino bien cierto baño de humildad en la Rosada. Ahora sienten que si provocan cambios desde afuera y se vuelve a acciones políticas conjuntas, podría pelear con mejores armas sus candidatos frente a los del Pro.

Los cálculos son que las mesas de estrategia electoral y timbreos se tomarán a full tras el Mundial. Si hay un buen resultado de la Selección mejor, El prisma futbolero en el contagio de lo social siempre estuvo en los esquemas de poder nativos y el Macri es su ADN.

Sin embargo, tuvo una lección en estos días. Cuando uno llega a la cima de las responsabilidades ya no de lo privado sino de lo público hay gustitos personales que deben postergarse. No irá al Mundial de Rusia como tenía previsto. ¿Menos fines de semana largo será el próximo paso?

Lo expresa a todos los periodistas que interactúa para pedirles “contención”. “Lo que menos me gusta de ser presidente es que me quita tiempo para mi vida personal”.

Al mandatario, también le aburre la política entendida como la rosca permanente. Es ingeniero y quiere cosas racionales y ejecutadas de forma rápida. Que las metas no se alcance como ya hubiera soñado lo pone en un punto de frustración al que el rosario de fórmulas marketineras no pueden revertir.

Lo dijo Carrió: “basta de globos” e invitó a Cambiemos a expulsar de la mesa chica a Jaime Durán Barba. El príncipe Ecuatoriano sigue con su prêdica de decirles a sus alumnos “hay que decirle a la gente que ahora le decimos la verdad”.

En cuánto se vea afectada la obra pública y bajo qué exigencias se termine cerrando con el Fondo, marcará los tiempos reales y la magnitud de la campaña política posible. De la idea que el peronismo estaba afuera de la discusión ahora se paso a pensar con más cuidado. ¿Peligra el triunfo en primera vuelta?