El hijo de Puricelli en la mira

La polémica generada en torno a la contratación de una empresa para llevar a cabo la actual campaña antártica comienza a nutrirse de nombre propios, mientras el Ministerio de Defensa intenta completar el aprovisionamiento de las bases antes de que se cumplan los plazos acordados. En diálogo con Clarín, la apoderada de Trade Baires Internacional, la empresa que había realizado esa tarea durante los últimos cinco años, habló de una “licitación a medida” y le apuntó a los integrantes de la Comisión Evaluadora, quienes recomendaron avanzar con las adjudicaciones pese a las irregularidades denunciadas. “Abierta la licitación, comenzaron a cambiar varias de las condiciones y a flexibilizar los requerimientos hacia Transport & Services”, aseguró Marina Bertino, apoderada de Trade Baires Internacional SA, en referencia a la actuación de la Comisión Evaluadora y a la Dirección General Servicio Logístico de la Defensa (DGSLD), el organismo que contrató y está a cargo de Carlos Lugones Aignasse. Además, desde la empresa le adjudicaron “injerencia directa” al hijo del ministro Arturo Puricelli, Alejandro, quien tiene su oficina “justo al lado del comodoro (Fernando) Aldet”, uno de los tres integrantes de la Comisión que figuran en la denuncia presentada ante la Oficina Anticorrupción. Los otros dos integrantes son el comodoro Mario Romarion y el contador Juan Manuel Locatelli. También fue denunciado el capitán de navío Sanz Rodríguez, quien dictaminó que el buque de bandera holandesa TIMCA estaba “en condiciones de realizar” la campaña. En el expediente formado en la OA, Trade Baires asegura que “no hay constancia que personal del Ministerio de Defensa haya inspeccionado el buque TIMCA para constatar sus condiciones técnicas”. El hijo de Puricelli no figura en la denuncia, pero estuvo presente en una reunión que se llevó a cabo en noviembre del año pasado en la sede del Ministerio con la presencia del embajador de Rusia y del agregado militar de ese país, quienes fueron a reclamar por las naves de su país. En ese encuentro también estuvieron Lugones Aignasse y el secretario de Planeamiento, Mauro Vega. Puricelli habló este jueves con radio Continental y no se refirió a su hijo.