El increíble gesto de Morales: festejó el envío de cuatro terapistas a la provincia

Volcó el dato en la presentación de la apertura de cuarentena en Olivos. El gobernador había sido reticente al cierre de las actividades.

Luego de minimizar el impacto del coronavirus en Jujuy, Gerardo Morales admitió que su provincia atraviesa el peor momento de la pandemia.

Si al principio habilitó las salidas individuales para realizar ejercicios, ahora depende de la ayuda de otras provincias para asistir a los enfermos.

Morales lo puso en los siguientes términos: “Jujuy está en el ojo de la tormenta, en el momento más complicado, tras tres meses sin casos”.

En los últimos 30 días, de hecho, los epidemiólogos confirmaron 640 casos positivos en la provincia que al inicio era una de las menos afectadas.

Por eso, Morales tuvo que agradecer a su par de Córdoba, Juan Schiaretti, el compromiso de enviarle cuatro terapistas para atender a sus pacientes.

Pero no solo agradeció sino que también se desligó de su responsabilidad gubernamental al asegurar que los primeros casos, que dieron lugar al brote generalizado, se debieron porque “dos personas cruzaron a comprar hojas de coca a Villazón (Bolivia)”. Y apuntó: “Allí estaría el origen”.

Ahora, entonces, no solo dio marcha atrás con las flexibilizaciones sino que decretó la prohibición de que los jujeño se junten a festejar el Día del Amigo.