El pacto entre Monzó y Massa por los empleados en el Congreso

El presidente saliente de la Cámara acordó con el entrante, un viejo amigo. Los detalles.

La transición en la Cámara de Diputados es, tal vez, la más amigable de todo el sistema político argentino. La buena relación entre Sergio Massa y Emilio Monzó facilita las cosas y hasta genera atenciones que no se darán en otros ámbitos del Estado Nacional.

El actual presidente -más allá de haberlo recibido la última semana en el Palacio del Congreso- viene dialogando con el futuro titular de la cámara hace semanas. Los une gran amistad desde varios años, por lo que incluso conversan mucho de política y de cómo estará armado el futuro recinto.

Según averiguó este sitio, en unas de las charlas que tuvieron alcanzaron un acuerdo. Que el tigrense no toque a la gente propia que Monzó dejó en Diputados. Incluso, el candidato por el Frente de Todos le pidió que dejara a su mano derecha, la secretaria administrativa Florencia Romano, ya que es la única persona que conoce a fondo Diputados y su trabajo es reconocido por ofcialistas y opositores. La respuesta fue afirmativa.

Monzó, además de acordar con Massa, está trabajando en la formación de un bloque de entre 7 y 11 diputados que le responderían directamente a él. Entre ellos se encontrarían García de Luca, Frizza, Aicega, Lospennato y en las últimas horas intentó tentar a los santafesinos Núñez y Scaglia. Ritondo, futuro presidente del Bloque Pro, atento a esto busca evitar la fuga.