El radicalismo se arma para tener una voz más potente en la coalición gobernante

Se fortalece una postura crítica ante el gobierno. Aunque las principales figuras apoyan, en el partido van escalando las voces disidentes.¿ Quien integrará la comisión de Acción política?

Los congresales de Gualeguaychú van encontrando mayores dificultades para seguir el sendero de un apoyo ciego al gobierno de Macri. Sin un liderazgo claro, ya que Ernesto Sanz no aparece muy activo en la discusión pública sobre el rumbo elegido por el Gobierno, voces críticas se abren camino por el control del partido. La idea de los disidentes es impulsar un suerte de relanzamiento de la UCR.

Hasta aquí, los radicales acuerdistas han asumido el costo político de apoyar medidas de alto costo social, en una coalición en el que al partido de Alem tiene acciones deficitarias, apenas dos  ministerios (Salud y Defensa) y algo de manejo parlamentario. Crece la convicción de que esta sociedad le sirve más al Pro, para expandirse en el país, que a los radicales.

El corredor amarillo promete seguir alistando candidatos potenciales a gobernadores e intendentes. En la pulseada interna de Cambiemos tiene mayor predicamento la opinión de una ex radical como Elisa Carrió, con su poder de veto, que cuadros que se juegan en costosos trámites parlamentarios a favor del oficialismo.

Los organismos de control fueron la casa que tuvieron los radicales en tiempos de oposición. Ahora, encapsulados en el oficialismo sin peso propio, la “rebeldía” se concentra en el campo universitario.

En este contexto, ocurrieron dos cuestiones significativas en el andamiaje de los boinas blancas. Por un lado, los acuerdistas no pudieron consagrar presidente del partido al tucumano José Cano. En cambio, fue votado el gobernador de Mendoza, Alfredo Cornejo, quien conforma a los sectores que quieren recuperar protagonismo. La ecuación se mide en que Cornejo tiene una relación confrontativa con Sanz, hasta aquí el radical que mejor se entendió con Macri .

Por otro lado, el acuerdo alcanzado por Angelici con Coti Nosiglia en Capital Federal llevó a este último a revalidar su poder de influencia en el sistema político. El mensaje en la botella desde al Rosada fue advertir a Larreta, que su camino a la presidencia de la Nación no será fácil dentro de Cambiemos. Para el radical significó la revancha del Congreso partidario de Gualeguaychú.

De hecho, Nosiglia integrará la Comisión de Acción Política de la UCR. En tanto, Jesús Rodriguez, maneja en las sombras la Fundación Alem, un grupo de pensamiento que hará observaciones críticas por del rumbo económico. Si la economía sigue sin arrancar su influencia tendrá campo fértil y ecos entre radicales que se sienten incómodos con el gobierno.