En la Casa Rosada empezó la caza de brujas por la filtración de las fotos de Olivos

La imagen es del festejo de cumpleaños de la primera dama, en julio de 2020.

La filtración de la primera foto del festejo de cumpleaños de la primera dama en la quinta de Olivos, a mediados del año pasado, cuando las restricciones eran totales, encendió las primeras alarmas. Todo comenzó en las redes y tardó unas horas en llegar a los medios. La primera excusa del Gobierno fue difundir que la foto estaba trucada. El objetivo era despegar a Alberto Fernández de la escena. Según los voceros oficiales, la imagen del Presidente había sido agregada por algún diseñador con mala intención y difundida por la oposición para hacer campaña sucia.

La mentira se derrumbó en apenas unas horas con la filtración de otra imagen de ese mismo festejo, el 14 de julio de 2020, donde se ve al presidente junto a Fabiola Yañez y su grupo de amigos. También estaban las modelos Sofía Pacchi y Stefanía Domínguez; el actor Fernando Consagra; Rocío y Florencia Fernández; Santiago Basavilbaso; el colorista Federico Abraham y la estilista Carolina Marafioti.

Todos sin barbijo y sin distanciamiento. 

Esa segunda imagen la publicó Guadalupe Vázquez, periodista y conductora de LN+. A esa hora, el presidente volvía de un viaje a Entre Ríos.

El impacto fue mayor porque el propio presidente y el jefe de Gabinete habían minimizado apenas unas horas las reuniones en Olivos.

La segunda filtración derrumbó la mentira del Gobierno y dio lugar a una caza de brujas para encontrar al culpable, algo casi imposible en estos casos. ¿Quién sacó la foto? ¿Quiénes la recibieron? Todos los presentes seguramente están bajo la mira.