Ahora Cambiemos agita el desafuero de Cristina

Lo terminaron de definir el viernes a la noche. Convocatoria de emergencia para que se trate la semana entrante. ¿Qué hay detrás?

Parece mentira. Siempre vuelve Cristina a la lógica de la política local.

El gobierno agita la Grieta, ahora instalando de vuelta su desafuero cuando sabe que no le dan los números y en base a un pedido del juez Claudio Bonadío que está discutido en la Justicia. El caso De Vido es el más reciente.

La estrategia de otra ofensiva contra la figura de la ex presidenta se tomó a última hora del viernes. El senador radical y jefe de bancada, Luis Naidenoff, lo articuló codo a codo con el Presidente Provisional del Senado.

Dificilmente esto tuvo un cierre solo parlamentario. El Gobierno volvió a poner en el centro de la escena a Cristina, en boca del mensaje presidencial en plena corrida cambiaria.

La casi simultaneidad con el fallo de Sala II de la Cámara Federal porteña que determinó que Nisman fue asesinado como consecuencia directa de la denuncia que había formulado el 14 de enero de 2015, en la que acusó de encubrimiento a Cristina Kirchner y ex funcionarios de su gobierno, del atentado terrorista contra la AMIA; no debe ser ignorada ante el viraje que tomó el pedido de desafuero.

Lo meramente formal es la excusa (si no se pronuncia el Senado el pedido de desafuero cae a los 180 días). Pero hay otro pedidos de desafuero, como el de Menem, que duermen sin novedades.

La cuña se mete en la interna del peronismo. Pichetto y otros saben que entregarla sería tan riesgoso como quedar como protectores. La ex presidenta ensanchó el diálogo con intendentes que hace meses la daban como muerta.

Ganar tiempo, sin importar las consecuencias ni las distracciones del momento, son armas que saca el oficialismo. Parecen desesperados ante la falta de resultados en la economía.