Fantino agarra Intratables en un momento de declive del programa

Mide muy poco. La pandemia hizo que perdieran fervor los debates. Temen que el público se haya cansado. El desafío del la figura de América.

Alejandro Fantino es un tipo de éxito. Tendrá un desafío importante al comienzo del segundo semestre: intentara salvar el juguete preferido de Liliana Parodi: Intratables.

El programa ya no es lo que era antes, Doman dejó el espacio del debate político en márgenes muy bajos y abandonó la nave para irse a la actividad corporativa, para el mismo Grupo del canal. Vila-Manzano lo pusieron de encargado Institucional de la flamante empresa adquirida, la energética EDENOR.

Fantino se despidió el martes de su magacine por la tarde y dijo que va a agarrar un fórmula uno, una marca registrada como lo fue Animales Sueltos.

“Ojalá esté bueno. Voy conducir. Quiero que todos jueguen, que todos la rompan, que todos sean cada vez mejores en lo suyo. Esa es mi lógica para laburar en un programa coral”, afirmó ante el nuevo desafío.

 

Lo cierto es que Intratables pasa por un muy mal momento de mediciones y de las repercusiones que supo tener. Su horario prime time está siendo captado por los programas de entretenimiento con MasterChef (antes) y La Voz (ahora). La franja de 22:30, que históricamente fue su fuerte, entró en declive des de marzo último.

Su sello distintivo fue siempre la confrontación de ideas con fuertes polémicas. Los protocolos por la pandemia aletargaron la dinámica del ciclo.

El programa fue rebautizado como “Base Marambio”, por el frío que corre en la pantalla. Fantino puede ser quien le de un electroshock.