Kicillof busca una Corte Suprema bonaerense de sintonía fina

Pelea por jubilar a jueces y abrir tres vacantes. Cierra filas con Cristina.

Ocurrió la semana pasada, sin prensa. Vidal fue a visitar a la Corte bonaerense para despedirse. El encuentro lo califican como cordial. A la ex mandataria se la vio golpeada por el resultado electoral. No se cruzaron viejas cuentas. Ella también intentó jubilar por la fuerza a por lo menos un cortesano.

No hay ideas nuevas en manejos del poder, en todo caso se reinventan. Con distintas maneras y formas a los gobernantes les gusta evitar sorpresas y tratar de manejar todos los botones del poder. El problema es cuando estos desplazamientos se hacen tirando por tierra mecanismos institucionales.

La Corte Bonaerense ha sido una piedra en los zapatos de varios antecesores de Kicillof. La ex gobernadora tenía el plan, de haber sido reelecta, de forzar la salida de cortesanos que venían marcándole la cancha. Fallos adversos que comprometieron las arcas provinciales y generaron un ambinete de malhumor.

La idea fue debatir que a los ministros de la Corte Bonaerense se les aplique el mismo criterio de la Constitución Nacional, es decir que se retiren a los 75 años y no que se perpetúen en el pedestal.

Algo parecido trama la nueva gestión y se estudian diferentes alternativas. Todas ellas parecen dificil de concretar. La presión pública, tan bien conocida por el kirchnerismo, puede ser la clave.

Es un tema que Cristina y el gobernador le encomendaron al flamante ministro de Justicia  Julio Alak. También es cierto que el inmediato objetivo es conseguir la salida del actual Procurador, Julio Conte Grand, un puesto clave desde donde se monitorean todas las investigaciones. El abogado del Pro quiere resistir.

Es un tema que Cristina y el gobernador le encomendaron al flamante, Ministro de Justicia , Julio Alak. También en cierto que el inmediato objetivo es conseguir la salida del actual Procurador, Julio Conte Grand, un puesto clave desde donde se monitorean todas las investigaciones. El abogado del Pro quiere resistir.

 

La Corte bonaerense advirtió el estado calamitoso de las cárceles, donde se alojan más de 42 mil internos a pesar de que las plazas disponibles no alcanzan las 22 mil. Al ex ministro de justicia, Gustavo Ferrari, le molestó el informe porque impulsó un plan para mejorar la vida carcelaria.

Daniel Fernando Soria es el preferido del nuevo gobierno bonaerense. Fue funcionario de Alak en la intendencia de La Plata. Los demás están en la mira de la nueva gobernación. Saben que tienen procedencia duhaldista y radical. Tres vacantes, al menos, para cubrirlas con aliados.