La elección del tufillo

Clima enrarecido y denuncias cruzadas. La apuesta de Milei es dejar sentado el fraude por si pierde por poco.

Se acerca la definición electoral en un marco de gran suspenso. Como nunca, el planteo pareciera ser disruptivo hacia la reconfiguración del sistema democrático. Cualquier cosa que ocurra el domingo a la noche marcará un cambio rotundo entre los segmentos de ideas y agrupaciones que componen la discusión de lo público.  Hay una importante posibilidad de que el proceso electoral quede enrollado en un desagradable tufillo en el que el que salga segundo cuestione el triunfo del otro.

Javier Milei lanzó la principal piedra a la credibilidad del sistema electoral. Quien bordea los límites del sistema, hizo una presentación ante la justicia denunciando que en la primera vuelta electoral habría existido un plan de manipulación de urnas por parte de la Gendarmería nacional, custodio principal del comicio. La solo idea que desparramó en el aire inquietó a Unión por la Paria, al ministro de Seguridad Aníbal Fernández, pero sobre todo a Patricia Bullrich, quien no comparte esa estrategia del líder libertario.

La ex candidata a presidente siente todavía un remordimiento por la segunda interna salvaje, que tuvo que soportar como una extensión lapidaria de su carrera presidencial trunca. Aparte, la ex ministro de seguridad, que suena para repetir en un posible gobierno de Libertad Avanza, siempre prefiere defender a las fuerzas de seguridad y tiene por Gendarmería una marcara preferencia.

Quizás todo quede en un empaste para el olvido, pero la paridad extrema que sugieren últimas encuestas, podrían marcar un hito sin retorno y sobre todo una semana larga de extrema incertidumbre a la espera del escrutinio definitivo. ¿Se podrá mantener la botonera de la economía aislada de ese clima faltando además tres semanas para la asunción del 10 de diciembre?

La fiscalización de la elección es trascendental. Los aparatos políticos también puede ser determinantes, sobre todo en al provincia de Buenos Aires. La justicia electoral viene advirtiendo faltante de boletas de LLA, cuya responsabilidad recae sobre los propios partidos políticos que reciben fondos para imprimir sus boletas de papel. A la vez, desde el macrismo se quejan de la figura de Milei ya que lo ven con métodos muy poco profesionales , sobre estimando sus posibilidades sostenidas en la bronca penetrante de una sociedad cansada.

A todo este tufillo , se agregan denuncias de amenazas de dirigentes políticos sobre garantías de seguridad para ellos y sus entornos familiares. La familia Massa y Cecilia Moreau, denunciaron haber recibido llamados intimidatorios.

Al filo de la veda, Milei lanzó u spot e campaña , diciendo todo lo que “no va a hacer” en referencia a polémicas frases que dijo o se le atribuyeron….