La explosión de la “burbuja” en Boca dejó en offside a muchos periodistas

14 jugadores del Xeneize más otras cinco personas dieron positivo en coronavirus.

Desde periodistas hasta dirigentes, desde futbolistas hasta empresarios, fueron muchos los que en los últimos meses pidieron la vuelta al fútbol en la Argentina en medio de la pandemia por el coronavirus.

“Hay que copiar a las ligas europeas”, insistían para mostrar que si un país no podía contener los brotes de coronavirus, al menos los responsables del juego sí lo podrían hacer con “burbujas sanitarias”.

Pero esa “burbuja” o “cápsula” estalló en mil pedazos en las últimas horas en Boca: 14 jugadores del Xeneize más otras cinco personas, entre integrantes del cuerpo técnico y empleados del hotel donde se alojaban, dieron positivo en coronavirus.

Esta situación cambió todos los planes: el entrenador Miguel Ángel Russo suspendió por al menos 72 horas las prácticas y hasta él mismo se aisló por tener una enfermedad previa que lo hace más vulnerable frente a un contagio de COVID-19.

Pero la explosión de la burbuja en Boca también podría alterar los planes a nivel continental: el equipo debe viajar a Paraguay para jugar el 17 de septiembre contra Libertad en la vuelta de la Copa Libertadores.

La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) amplió a 40 cupos la lista de buena fe de los clubes previendo que esto pudiera pasar, pero en el caso de Boca, casi la mitad de los jugadores profesionales se contagiaron aún aislados.

Los casos de Boca se suman al de los últimos días de River. También a los de otros equipos de Primera División. Los contagios de los futbolistas no hacen más que demostrar que la vuelta del fútbol, pese a los intereses económicos en juego, quedó en offside.

Muchos periodistas deportivos anticuarentena, incluso, terminaron contagiados.