La lapidaria carta de una jueza a la Corte por falta de espacio en Tribunales

La respuesta de la justicia contra corrupción se mide en hechos. Una jueza dice que la falta de un espacio físico impide el funcionamiento de un Tribunal Oral. ¿Qué dice la carta?

Es el Tribunal Oral Federal 8 cuyos integrantes fueron nombrados hace un año pero nunca pudieron comenzar a trabajar para juzgar hechos de corrupción, porque no les dan espacio en Comodoro Py.

Los jueces son Sabrina Namer, Nicolás Toselli y María Gabriela López Iñíguez quienes fueron designados hace un año pero nunca pudieron arrancar a trabajar porque no les dan lugar.

Por carta, la jueza Namer se quejó ante la Corte Suprema de Justicia, el Consejo de la Magistratura y el Ministerio de Justicia. “Es habitual que me pregunten los motivos por los cuales, casi a un año de haber sido designada, todavía no estoy en funciones pese a la clara necesidad de jueces en el fuero (sin ir más lejos, el tribunal que hoy juzga las irregularidades de la investigación del caso AMIA está integrado por una jueza que debe dejar sus actividades en el fuero penal económico para que el juicio pueda realizarse). Y no hay excepción a la cara de sorpresa, decepción y carcajadas del interlocutor, cuando contesto que no encuentran lugar en el que sentarme en Comodoro Py”, escribió Namer.

“Mientras se esperan soluciones inmobiliarias o cuasi futbolísticas a la deriva del cierre de la temporada de pases de un tribunal a otro, se lee en los diarios que algunas causas de banqueros o de funcionarios acusados de corrupción prescriben por falta de un cuarto juez para iniciar los juicios, o que los juicios de lesa humanidad no pueden empezar por el mismo motivo, o que quedan libres narcotraficantes por soluciones que reducen su pena para no violar los plazos de prisión preventiva ante la imposibilidad de hacer juicios orales”, resumió.

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