La mujer del fiscal antilavado es funcionaria de Coscia en Cultura

gonellaLa designación de la procuradora Alejandra Gils Garbó cambió la suerte de Carlos Gonella: pasó de ser secretario en Córdoba a comandar la fiscalía que se ocupa del lavado de dinero, la misma que decidió mirar para el costado en el caso de Lázaro Báez. Su pareja, María Elena Troncoso, es funcionaria del secretario de Cultura de la Nación, Jorge Coscia. Y cobra el beneficio del desarraigo, a pesar de que vive actualmente en Buenos Aires. Troncoso fue nombrada como directora Nacional de Acción Federal el 11 de diciembre de 2011. Su designación inicial fue por 180 días hábiles. Y de manera transitoria. En septiembre pasado, se prorrogó por igual período, mediante el decreto 169/2012. “No se pudo cubrir el cargo de forma definitiva”, justifica el mencionado decreto. Desde que asumió en Cultura, Troncoso compartió varios actos con su pareja, también oriundo de Córdoba. En agosto del año pasado, en Villa María, compartieron la presentación de un libro de Jorge Abelardo Ramos, autor de la “Historia de la Nación Latinoamericana”. Pocos días después también estuvieron juntos en un acto junto al secretario de Derechos Humanos, Ramiro Fresneda. “ En 2003 se produjo una refundación de la República”, afirmó Gonella en ese acto. En su página web, plagada de fotos, Troncoso publicó información de algunos de esos eventos. En diciembre pasado, casi al mismo tiempo que Gonella era designado por Girls Garbó al frente de la Procuraduría Adjunta de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), la funcionaria recibió otra buena noticia. Mediante el decreto 2628, firmado por la presidenta Cristina Kirchner, le otorgaron el beneficio del desarraigo, un plus que cobran aquellos funcionarios que trabajan a más de 100 kilómetros de su lugar de residencia permanente. Efectivamente, Troncoso figura en los registros oficiales con domicilio en la localidad de Bialet Massé (Córdoba). Pero ella y su pareja viven hace meses en Barrio Norte. Sin embargo, hasta ahora no cambiaron su domicilio, según consta en los registros de la Ciudad. En el caso de Troncoso, el desarraigo tuvo que salir como una excepción porque no está previsto en el decreto que regula ese beneficio para los funciones del Poder Ejecutivo, el 1343/74. Según datos oficiales a los que accedió Clarín, Troncoso cobró en marzo de este año $28.037 por su cargo en la Secretaría de Cultura. En abril, llamativamente, cobró $82.600.