La pelea por los vices concentra la atención de los radicales

El partido radical quiere hacer valer su apoyo en momentos críticos con más participación en un posible segundo mandato de Macri.

Y decían que los vice eran aburridos… El radicalismo quiere hacer valer su costo político por apoyar el ajuste de Macri con más cargos y apuesta a la vicepresidencia.

Al menos, el presidente de la UCR y gobernador de Mendoza sigue trabajando para ello. Hay resistencia en el núcleo duro que rodea al primer mandatario ya quieren alguien de poco peso y muy fiel al presidente. Repetir con Gabriela Michetti les parece la movida lógica.

Alfredo Cornejo está agitando una discusión interna en el futuro rol del radicalismo ante un posible segundo mandato de Macri. Hasta aquí los radicales se dividieron mayoritariamente en el apoyo irrestricto sin obtener demasiado a cambio. Eso quieren modificarlo y saben que antes del cierre de las listas es el momento de apretar.

En plena corrida cambiaría, cuando volvieron a habitar por unos días las reuniones acaloradas de Olivos, Sanz, Morales y Mario Negri, perdieron una oportunidad única de influir en el entorno del presidente. La mesa ampliada volvió a ser mesa chica en cuanto se calmó el dólar.

La pregunta que flota en el ambiente radical es si ahora no tienen otra oportunidad. Muchos de los cuadros principales querían jugar la carta brava de Vidal adelantado las elecciones.

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La gobernadora coincide en algo con el presidente: no quiere innovar la fórmula. El radical Daniel Salvador ha sido un fiel compañero, a tal punto que los propios radicales le recriminan por mayor autonomía o perfil de criterio.

Al mismo tiempo el lugar que ocupa Salvador en la Provincia es sostén de los que replican igualdad de confianza en la alianza a nivel nacional.

Mario Negri en un león herido, ya que fue sacrificado en el Consejo de la Magistratura a cambio de sacar leyes claves. Ahora, el cordobés que la tiene difícil en la interna con Mestre y quiere asegurarse el premio consuelo. Ante la salida de la órbita del Parlamento de Emilio Monzó, ese es un puesto codiciado sino se logra ganar la pelea por la vicepresidencia de la Nación.

Ambas cámaras legislativas, la de la Nación y la de Provincia, tendrán números muy ajustados para que el oficialismo saque leyes. Ocupar al presidencia legislativas será clave era hombres de experiencia.

A tal punto esta la temperatura del debate que en la provincia de Buenos Aires se ve plausible la salida de Salvador y al entrada de un radical con mayor volumen político. Nervios que se tocan antes de la pelea final.