La transición simulada entre Macri y Alberto puede terminar en escándalo

Los protagonistas de la política son grandes simuladores de la anti Grieta y de la llamada transición ordenada. La ficción terminó. El propio gobierno saliente notificó que la relación está congelada. Macri mandó a su Ministro de Defensa (todo un detalle bélico) apuntando al peronismo: “Al parecer dejaremos los papeles sobre la mesa”, fue la sobre actuación que ejecutó Oscar Aguad.

En el Albertismo, dicen estar cansados de medidas que toma el actual gobierno y que quiere socializar en sus costos sociales, cuando en realidad habrían sido in consultas. “Aquí no existe el cogobierno”, se quejan en la calle México.

Tras la queja de bandoneón de Macri por  las “sorpresivas” PASO , el sobre salto de la economía generó algunos gestos de madurez que anticipaban una “transición civilizada”. Nada de eso.

Se pasó a las chicanas, desconfianzas y zancadillas, clásicas del sistema local. ¿Por qué pasaríamos a ser Suiza? ¿Acaso nos contagiaría la visita de Federer?

El primer problema de formas institucionales es que todavía no está definido donde y como se hará la transmisión de mando.Un revival del 2015, casi los mismos protagonistas, salvó que Cristina simula ser una actriz de reparto.

Alberto, tras la reunión en Recoleta, salió convencido en que la ceremonia del traspaso de mando debería ser en el Congreso. El gobierno de Macri pretende que sea , por tradición, en la Rosada. Sainete repetido.

Ante una mega deuda millonaria que Alberto hereda, sus antenas están puestas en que la verdadera transición está en marcha con las conversaciones iniciadas ante Kristalina del FMI.

El primer problema de formas institucionales es que todavía no está definido donde y como se hará la transmisión de mando.Un revival del 2015, casi los mismos protagonistas, salvó que Cristina simula ser una actriz de reparto.

El caso de compleja resolución no parece inhabilitar para que otros temas de diverso calibre se filtren: aborto y hasta temáticas bricolaje como si los billetes deben dejar de tener animalitos para que vuelvan los San Martín y Belgrano.

La peste de la Grieta alcanzó la transición de provincia. Los primeros contactos entre VIdal y Kicillof, pese a los acentos de la herencia , habían sido maduras. La gobernadora se transformó en la Reina Frozen y Áxel con sus cuatro amigos del Clio, cortaron relaciones. Un funcionario de la mandataria perdió la paciencia y quejumbroso lanzó: “ya se van a dar cuenta estos pibes lo difícil que es gobernar”.

Kicillof espera instrucciones la dueña de los Dragones de Recoleta para conformar los nombres de su gabinete. Otro de los secretos mejor guardados.

Todavía hay tiempo para que las hilachas se corten y se restablezcan parámetro de normalidad y convivencia. Quizás la última semana de noviembre, con un nuevo gabinete de Alberto en la cancha, los teléfonos vuelvan a estar conectados.