El garage y el ascensor que usó Stiuso para esquivar los medios

El ex espía estuvo apenas 15 minutos en la UFI AMIA. Luego se camufló con anteojos y un gorro y se fue por un ascensor hasta el garage del edificio. 

La noticia sobre la declaración de Stiuso comenzó a circular a media mañana por los portales y lentamente fueron llegando todos los móviles de TV a la puerta de la Unidad AMIA, frente a Plaza de Mayo. La expectativa iba creciendo. Recién cerca de las 14 se supo que Stiuso se había ido tres horas antes, casi sin dejar rastros.

Las fotos que acompañan esta nota son del ascensor que utilizó el ex espía para irse sin que nadie lo vea. Minutos después de las 11, Stiuso y su abogado se subieron a un ascensor secundario que tiene comunicación directa entre el piso 7 y la cochera del edificio, donde seguramente lo esperaba un auto. El ascensor principal del edificio estaba custodiado por dos efectivos de la Prefectura que nunca lo vieron salir.

Antes de irse de la Fiscalía que pertenecía a Nisman, Stiuso se colocó un gorro y unos anteojos, como en las películas. La escena fue vista por varios testigos.

Su llegada estaba prevista para las 11. Se anticipó unos minutos. Cuando se anunció su llegada, los fiscales Sabrina Namer y Roberto Salum estaban tomando mate y repasando expedientes. La audiencia fue demasiado breve y con varios testigos.

Como ya informaron todos los medios, Stiuso estaba citado para declarar por un informe que hizo la ex SIDE sobre las llamadas internacionales efectuadas en el país entre 1991 y 1996, referidas a los atentados en la AMIA y la Embajada de Israel. El ex espía se negó a declarar porque ya está imputado por esos mismos hechos en una causa que le inició el ex jefe de la AFI, Oscar Parrilli y que tramita en el juzgado de Julián Ercolini.