Los ángeles del Pro y el gran supervisor Marcos Peña

En el Congreso hay ángeles de la guarda del discurso que se baja desde la Rosada. También hay un gran supervisor del protocolo comunicacional. Ese mismo que ahora es criticado por Carrió.

Hay diputados del oficialismo que ya manifiestan su desagrado por los pasillos. Acercarse a un periodista y darle una nota, significa pasar por una mesa examinadora sobre contenidos y formas. Ya no es la crispación k ni el enfrentamiento frontal. Ahora, entre globos y sonrisas hay un protocolo a seguir.

“Los ángeles” de Nicolás Massot, son operadoras de prensa que reportan directo a Jefatura de gabinete. Hay una obligación en informar cantidad de notas y con quiénes hablan los integrantes del bloque Pro.

Cuando un diputado o senador toma contacto con un off en su despacho se recomienda la presencia de un encargado de prensa que tome nota de lo que se habla. El objetivo sería tener un resguardo por si el periodista luego saca algo de contexto.

Por supuesto que no todos hacen caso cien por ciento a este protocolo no escrito pero si muy enfatizado por el propio Marcos Peña cuando todos los días a las 8 se adoctrina a los voceros del gobierno nacional y de provincia.

Este fin de semana, Elisa Carrió cuestionó la política comunicacional del gobierno calificándola de mala. Peña contestó desde su página de Facebook, sin ir al choque.