Los drones no se detienen ante el vacío legal

En muy poco tiempo, los artefactos tecnológicos que llegaron para revolucionar un mercado hasta hace unos años inexistente se volvieron furor en el país y algunos hechos que ocurrieron los pusieron en el ojo de la tormenta, ya que su utilización genera controversia por la falta de una legislación que los ampare.El debate que quedó licuado en la semana por otros temas , te lo contamos en Expedientepolítico

La ausencia de una regulación internacional -recién llegaría por parte de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) entre 2018 y 2020- hizo que la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) lanzara en julio último un reglamento para darle un marco legal al funcionamiento de los aparatos, pero la polémica surge porque dicho reglamento comenzará a regir recién a partir del próximo 12 de noviembre en nuestro país.

La resolución 527 que salió publicada en el Boletín Oficial el 15 de julio establece que habrá tres categorías de drones y que quienes quieran operarlos deberán dar un examen certificado en un hospital público que garantice sus aptitudes psicofisiológicas y de cuenta de su motricidad y su capacidad visual y auditiva. Además, deberán ser mayores de 18 años o de 16 con la supervisión de un mayor y, al igual que en un auto, no podrán estar bajo el consumo de alcohol o estupefacientes.

Hasta el momento, sólo existe una normativa de penas establecidas en el régimen de infracción aeronáutica, pero que no está adaptada a los tiempos que corren. Hoy en día el uso de drones fuera del ámbito doméstico está prohibido, sin embargo, la masificación de estos vehículos, que se pueden conseguir por 200 dólares, y la falta de legislación vigente, hacen que se utilice en cualquier lugar y por cualquier actor, incluido medios de comunicación.El descontrol de los drones llega también a los medios. Hace poco en el relanzamiento de Telenoche la nueva estrella fue este aparato con cámaras aéreas. En el canal dejaron de utilizarlo en forma masiva.

Hace tan sólo dos días, en Constitución, dos mujeres fueron golpeadas en la cabeza por un drone. Si la reglamentación ya estuviese en funcionamiento, el conductor del aparato no lo habría podido manejar ya que se prohíbe “operar sobre zonas densamente pobladas o aglomeración de personas” y hoy su culpabilidad por lo que pasó sería aún mayor. Pero como hasta ahora hay una suerte de vacío legal, las aeronaves no tripuladas siguen volando sin control.