Lo que dejó de ser esencial en la campaña:¿Dónde quedó el debate de la educación?

De la Carpa Blanca, a la presencialidad vs virtualidad : siempre el país en modo jardín de infantes. Los políticos dejaron en el cajón el debate educativo en la carrera legislativa.

Eduardo Lazzari

Por Eduardo Lazzari

El 2 de abril de 1997 sucedió un episodio disruptivo en las formas de reclamo del sistema sindical. Fue conocido como el fenómeno de la Carpa Blanca, una convocatoria transversal a la sociedad para comprometerse con la causa de la educación a partir de un reclamo permanente de mejores salarios a los docentes,

Lo novedoso de las formas del reclamo es que fue pacífica, sin cortes de calles ni marchas estridentes, sino montando una carpa con docentes ayunando frente al Congreso.

Marta Maffei, una docente entrerriana con cara de señora buena, encabezó la gesta blanca que culminó tras 1003 días de una carpa que pasó a ser una parte icónica de las protestas sociales de la joven democracia.

Tuvo como consecuencia la sanción de una Ley de Financiamiento Educativo , la famosa oblea que terminaron pagando un sector de la clase media argentina solo para prolongar la agonía. Un parche más…

Quizás después de esa ola de fervor de la militancia por la educación del debate público, no hubo igual expectativa hasta la oportunidad que abrió la pandemia.

El Estado, con sus diferentes variantes de gobiernos , desde el 83 viene postergando reformas de fondo en materia educativa, Alfonsín convocó a un Congreso Pedagógico . El Padre de la democracia fracasó como con otros planes reformistas en medio de una transición plagada de un campo minado.

Las urgencias económicas fueron tapando los proyectos ambiciosos (el traslado de la capital, entre otros) , y la educación fue boyando como una materia pendiente perpetua .

Por eso ¿Por qué sorprenderse? Las candidaturas fueron por el lado de los médicos , otros símbolos del coraje de intentar salvar vidas. No están en las listas los verdaderos héroes de las terapias intensivas. Ellos no tiene tiempos de discursos.

De los spots y los dichos chicaneros, es inexistente la bolilla temática educativa, Seguro que en los debates televisivos habrá unos minutos para cumplir.

Lo realmente ilógico que siendo elecciones legislativas a nadie se le pregunte que batería de proyectos tendrá en el futuro Congreso para esta u otra materia trascendente.

La grieta, entre los que pensaron en aulas como focos de contagios o los que subestimaron las burbujas. Jamás se ocuparon de planificar una estrategia conjunta ,( estado y privados) conteniendo a familias y proyectando una nueva normalidad con la cual convivir.

¿Acaso los chicos no tuvieron un poder mayor de adaptación que sus docentes , carentes de una estrategia digital? Mientras sacudían el avispero binarios de buenos y malos. ¿Quién se ocupó de los miles de chicos desconectados?

Lo realmente ilógico que siendo elecciones legislativas a nadie se le pregunte que batería de proyectos tendrá en el futuro Congreso para esta u otra materia trascendente.

¿Es acaso tan revolucionario querer que un progenitor cuente con las mejores herramientas para afrontar el futuro?

El presidente estuvo orgulloso en el 200 aniversario de la UBA que se realizó en Derecho, facultad de la que es docente. Rescató la oportunidad :  “permitió que los hijos de los obreros pudieran estudiar. Que accedieran todos y no haya una condición económica que limite la posibilidad de estudiar y aumentar nuestro conocimiento”, dijo.

Ese destino ya no es el de “mi hijo el doctor”, sino también saber diagramar una idea de bachilleres con destino de oficios y preparados para incursionar en los nuevos empleos.

La analogía con la salud es inmediata. La política buscó espejos de “Favaloros” para competir y recuperar credibilidad.

La educación esta en la vidriera pero no en la agenda virtuosa y jerarquizada . La Pandemia puso su ancla en la estación “oportunidad” de una materia muy sensible que no se aprobará de taquito.