Los secretos que se llevó Lole

El ex gobernador de Santa Fe y senador, Carlos Lole Reutemann, falleció a los 79 años de edad tras una dura y larga enfermedad.  Respetado por todo el arco político y difícil de traducir, Lole construyó un mito con aquel “vi algo feo”, frase que redondeó su negativa a presentarse como candidato a presidente cuando Duhalde se lo pedía. La opción sustituta fue Néstor, para cambiar la historia.

Quienes lo recordaron en llamados a periodistas que escribieron la necrológica destacan que sobre esa frase se construyó un mito y que el ex piloto de fórmula uno sintió que no tenía nafta para presentarse en la complicada argentina del 2002, después de las muertes de lo piqueteros Kosteky y Santillán.

El Cabezón pretendía una fórmula de Lole secundado por el entonces mandatario pampeano Rubén Marín. Hubo otras frase que no tuvieron tanta trascedencia que “vi algo feo”. En una oportunidad, fines de los 90, en una enérgica discusión en el bloque peronista de legisladores, Reutemann dijo a sus colega “yo manejaba a más de 300 kilómetros por hora con un buzo anti llamas, no me van a decir lo que tengo que hacer”.

Como outsider de la política, Menem lo puso a prueba y lo lanzó. Fue de esa camada de farandulización de la política el que más entendió las reglas del sistema y sus crueldades.

Reutemann hizo fortunas como deportista. Mucho de esa herencia tendrá una fuerte disputa familiar entre las hijas y su última pareja. Además de un campo y varias propiedades existen capitales en Mónaco.