Luis Juez disfrutó el vestuario, pero se tuvo que guardar la carne

El embajador en Ecuador había encargado 120 kilos de carne a un frigorífico de Córdoba, pero los jugadores se fueron rápido.

Luis Juez, el embajador argentino en Ecuador, había hecho una particular invitación para los jugadores de la Selección. El funcionario mandó a pedir 120 kilos de carne a un frigorífico de Córdoba y se ilusionó con una cena con Messi y compañía. Sin embargo, el plan se frustró porque después de la victoria por 3-1 en Quito, el plantel armó las valijas y se dividió en dos vuelos.

Una parte de la delegación viajó rumbo a Europa, ya que los jugadores juegan este fin de semana para sus equipos. La otra parte del contingente tomó un avión para regresar al país.

De todos modos, Juez se dio un gusto grande y pudo ingresar al vestuario apenas terminó el partido. Se sacó fotos con Messi, Sampaoli, Dybala y muchos más.

Durante la estadía de la Selección en Ecuador, Juez se pegó a los dirigentes, aprovechó cada instante como un niño y no se cansó de subir fotos con los cracks en su cuenta de Twitter.

La carne ya está en camino. El fuego lo ponen los jugadores“, había dicho Juez, en la previa del encuentro. ¿Qué hará ahora con tanta carne?

Algo está claro. Luis Juez es un amuleto de la suerte para los equipos argentinos que se presentan en Ecuador. El embajador recibió con los brazos abiertos a la Selección Juvenil, que se clasificó con mucha angustia al Mundial Sub 20. Luego, colaboró con Atlético Tucumán en la Copa Libertadores, cuando allanó el camino del micro que transportaba al plantel para que llegue a horario a su encuentro ante El Nacional. Y anoche con el pase al Mundial se recibió de talismán. ¿Irá a Rusia?