Macri proyecta ajustes tras apretado triunfo en la Ciudad

Los grandes perdedores fueron los encuestadores: casi todos fallaron al darle al PRO una ventaja de casi 10 puntos. Finalmente, fue un ajustado triunfo con 3 puntos de diferencia. Los abrazos de Macri a gente común en el nuevo spot publicitario debe encarnar ahora en un candidato más abierto a escuchar y caminar la provincia de Buenos Aires. Instalar que ganó el gobierno nacional es

tan ridículo como creer que el macrismo no debe moverse ni un ápice de su color dominante, el amarillo. El radicalismo que apoyó a Rulo Lousteau, exige ser tenido en cuenta por Macri como un aliado estratégico, no solo en el control de la elección sino en la administración futura del poder.

Macri se empecinó con ir a jugar entero con su “candidato”, que indudablemente no tiene un clientela propia de votantes como si los podría haber generado Michetti. Muchos, desde Cambiemos, hablaban anoche que habrá que alcanzar un acuerdo después de las Paso con Massa, de guiño con sus equipos técnicos, fundamentalmente el económico, para abrir los brazos al votante peronista no k. Los replanteos de campaña ya están activados.