Macri y los federales coinciden en algo: Gils Carbó no puede seguir

La salida de la Procuradora es uno de los objetivos a corto plazo si el jefe de Gobierno gana el 22. También tiene todas las fichas puestas el polémico juez Oyarbide. Cómo se reacomoda el escenario en Comodoro Py.

El resultado del domingo pasado cayó como un baldazo de agua fría en Comodoro Py. Nadie estaba preparado para un “triunfo” de Mauricio Macri. “Ellos (por el macrismo) fueron muy maltratados en este edificio”, admitió esta semana un juez federal que sonrió como pocos. Daniel Scioli era, sin dudas, el favorito. Pero los jueces y fiscales tiene una cualidad única, casi una marca registrada: adaptarse a la realidad. Y de repente se respira un cambio de época. Todas las miradas apuntan a la procuradora general Alejandra Gils Carbó, alineada con el Gobierno. También se vislumbran cambios en la ley del Ministerio Público y en el Código Procesal Penal, dos herramientas centrales para el andamiaje de los tribunales federales.

Las causas seguirán congeladas hasta después el balotaje. Por estas horas, en Tribunales sólo se habla del resultado electoral y de sus consecuencias. La primera víctima sería Gils Carbó, marcada a fuego por su estrecha vinculación con Carlos Zannini. “Se va a tener que ir”, coinciden sus principales detractores en los tribunales de Retiro. Macri tampoco la quiere en ese cargo. Con todo, el escenario no parece sencillo. La Procuradora no tendría intención de apartarse.

“No se va a ir tan fácil como creen”, advierte uno de los nuevos fiscales. En ese caso, el flamante Gobierno necesitaría una mayoría de dos tercios en el Senado, un escenario muy lejano para Cambiemos. “No fue independiente, vamos a usar todos los mecanismos constitucionales para que se vaya”, dice Ernesto Sanz, futuro ministro de Justicia si Macri es presidente. En Comodoro Py, donde Gils Carbó acumula varias causas, no son pocos los que ya piden su renuncia. ¿Cómo se destraba ese escenario? Un funcionario con experiencia en Tribunales lo respondió con esta anécdota: “Durante el menemismo, hubo un Procurador que no quería ir hasta que un funcionario lo llamó y le dijo: ‘Te vas o te cambio las llaves del despacho´”.

A medida que pasan los días, se acumulan los candidatos para reemplazarla. En los tribunales de Retiro sonaron esta semana dos nombres: un juez de la Cámara de Casación, y el ex fiscal general de la Ciudad Germán Garavano. Ambos esperan un llamado, pero no habría novedades hasta después del 22.

El otro apuntado es el polémico juez Norberto Oyarbide. “Tenemos que conseguir el número necesario en el Consejo para que no siga en el cargo, tiene decenas de denuncias”, afirma Sanz. Pero aclara: “Nosotros no vamos a perseguir a los jueces de Justicia Legítima, queremos que adopten el compromiso de ser independientes”. El senador radical ya trabaja en un plan para el Consejo de la Magistratura, un ámbito clave para generar cambios en materia judicial.

Otro que carga con el peso de la derrota es el secretario de Justicia Julián Alvarez. “Se equivocó, quiso llevarse el mundo por delante y cambiar a los jueces. En Comodoro Py el sistema funciona de otra manera”, opina un funcionario K que conoce los códigos de los federales.

Si Scioli logra revertir el escenario electoral adverso, continuidad es la palabra que más se escucha en Tribunales. En cambio, un triunfo de Macri cambiaría el escenario. “Ellos no tienen operadores y ya cambió el rol de la SIDE en este edificio”, se sinceró un fiscal federal con más de dos décadas en Comodoro Py. Ya hay dos figuras que emergen como puentes con los federales.

Uno es el ex juez y ex fiscal, Guillermo Montenegro, el principal candidato para ocupar el ministerio de Seguridad a nivel nacional. En 2007 dio el salto a la política, pero nunca se distanció de sus ex colegas. Esta semana no fue la excepción: el lunes se lo vio caminar por los pasillos de Comodoro Py. Visitó a varios jueces y fiscales amigos. Con algunos, sólo cruzó un saludo y algún comentario al paso sobre el batacazo del domingo. Con otros, ya dialogó sobre sus proyectos. “Tiene previsto convocarnos para integrar una comisión asesora en materia de narcotráfico, sería para asesorarlo, sin cargos”, contaron dos de sus interlocutores. Ocurre que Montenegro podría ser ministro pero también suena para hacerse cargo de una nueva agencia federal para combatir el narcotráfico, un proyecto con amplio consenso entre los federales.

La otra figura que emerge si Macri gana el balotaje es Daniel Angelici, el presidente de Boca. Su influencia en la justicia porteña se trasladaría a Comodoro Py. “Fue el club lo que le abrió las puertas de ese mundo”, admite un macrista que lo conoce demasiado. Casualmente o no, la semana previa a las elecciones, “El Tano” almorzó con varios jueces y fiscales que están cerca del mundo Boca. “Se habló del club, pero no fue el único tema”, deslizó uno de los comensales. De la mano de Angelici, también podría emerger la figura del actual fiscal general porteño, Martín Ocampo.

En Comodoro Py se alargó el tiempo electoral. Nadie quiere arriesgar, muchos menos antes del balotaje. Hasta ese día, las causas más resonantes seguirán su trámite en silencio. No se esperan decisiones resonantes en el caso Hotesur, ni en la ruta del dinero K o en el caso Ciccone. Por los pasillos se ven algunas caras largas, pero otros sonríen

Por Nicolás Pizzi