Noah Mamet se va con carambola a otro lado

El embajador de Estados Unidos está viviendo sus últimos días en la Argentina. Los días viernes, muchos políticos, jueces y hasta periodistas lo extrañarán.¿Por qué?

Mamet se encariñó con el país e hizo muchos contactos y amigos. Políticos y diplomáticos extrañarán a este campechano y buen anfitrión, nacido en California, por algo en particular…

Fue chofer y llegó a manejar la caja de la campaña de los Demócratas, y ahora tiene una pasión: el pool de los días viernes.

Ya se había transformado en un clásico de la residencia del embajador en Buenos Aires, donde Mamet organizaba campeonatos de pool con jueces, políticos y hasta periodistas importantes.

También era habitual que hiciera viajes con sus amigos y publicara las fotos en las redes sociales. Uno de los viajes fue en la Patagonia a bordo de una Harley Davidson.

Mamet llego a la Embajada del 15 de enero de 2015 luego de los turbulentos años de relación entre el kirchnerismo y EE.UU, y tres días antes de que se convulsionara el país con la muerte del fiscal Alberto Nisman. No le esquivó al bulto y fue al velatorio a expresar sus condolencias a la familia del fiscal.

La carambola de la política, con el triunfo de Donald Trump, lo alejará de la carne argentina y las pasiones del fútbol y farándula que había adquirido.

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