Nosiglia juega su ficha a la Grieta dentro Cambiemos

Hay varios nombre en danza para presidir la UCR. Quienes se sienten adentro del gobierno no quieren que los corran por izquierda. Coti ensaya un candidato.

El gobierno de Macri no los tiene muy en cuenta y solo se maneja con Ernesto Sanz y ahora más habitualmente con el titular del interbloque parlamentario de Cambiemos, Mario Negri.

Estos dos actores de la política radical atemperan ánimos calientes de otros correligionarios que se siente convidados de piedra y temen correr con altos costos cuando el Gobierno apure reformas como la laboral y ajustes en las tarifas, una vez ratificados en la urnas.

La Convención de Gualeguaychú consolidó una sociedad con el PRO, que si bien tiene beneficios minoritarios para el partido centenario, lo puso otra vez en la marquesina del poder y permitió borronear, por un tiempo largo, al peronismo como factor de poder.

Difícilmente Nosiglia pueda contraponer este rumbo. Armador de tantos conciliábulos con peronistas, esta jugada macro de nuevos protagonistas del cambio, lo tiene maniatado en el poder de fuego. Su rol de armador de la candidatura de Martín Lousteau, como una alternativa superadora al Pro en la ciudad, tuvo un magro resultado en las PASO.

Sin embargo, al Coti nunca se lo subestima. Mandó, a un casi desconocido, el legislador porteño Hernán Rossi, a competir por la presidencia del partido, a nivel nacional. Una patriada casi imposible ante el poder que hoy ostentan otros candidatos como Negri ( hombre de Olivos) y Fredy Storani (rebelde de alianza Pro). Es una forma de entrar en la mesa de discusiones sobre donde va a ir la UCR en la sociedad  con el macrismo.

Coti cree que si salva un piso de votos del líder de ECO, puede tener más fortaleza en los planteos críticos al desdibujado rol del partido en Cambiemos. Inclusive se animaría a postular a Lousteau como autoridad partidaria en la UCR porteña, lugar que debe dejar su hombre de confianza, Emiliano Yacobitti.

“Nos apoya la Juventud Radical, tenemos veinte delegados asegurados y vamos sumando”, dice Rossi. En diciembre, 98 delegados elegirán al próximo titular del Comité Nacional

El juego de poder, con la interna eterna de los radicales, se complementa con los dirigentes que quieren cerrar grietas de la coalición y evitar críticas a Larreta, que se postula como un continuador del proyecto nacional de Cambiemos. Jesús Rodriguez y el funcionario sin rol en Interior, Facundo Suarez Lastra militan para borrar disidentes.