Aída Ayala sigue con fueros pese a que iba a renunciar

La radical chaqueña tiene protección de un sector del oficialismo al igual que Cristina de una parte del peronismo.

Acusada y procesada por lavado de dinero, la diputada Aída Ayala (Chaco) termina el 2018 en su banca. Pese que al presentarse a declara a la justicia se había comprometido a renunciar a los fueros. Una declaración para la foto ya que nadie puede de motus propio renunciar a los fuero sino renuncia a la banca .

Para aprobar la remoción de los fueros de un legislador se necesita la aprobación de dos tercios de los diputados que participan de la sesión, según lo establece el artículo 70 de la Constitución Nacional. El bloque radical de Cambiemos siempre frenó esa posibilidad a pedido de Aída quien fue una autoridad importante dentro de la estructura partidaria.

El caso que ya casi pasó en el olvido de la escena nacional, pone al oficialismo en un dilema de doble vara moral pedir el desafuero de Cristina y no hacer lo mismo con una de sus integrantes. El realidad todo el sistema político, salvo honrosas excepciones termina justificando el paraguas de los fueros ya que una vez que se abra una puerta puede complicar a muchos otros casos.

Ayala está acusada de ser la “jefa de una banda” dedicada al lavado de activos durante su gestión como intendenta de la capital chaqueña, entre 2003 y 2015.

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La diputada ya no encuentra reciprocidad con el ARI. Carrió le bajó la cortina y solo la atiende su comprovinciana, la diputada, Alicia Terada, quien recibió instrucciones de Lilita de enfriar la relación hasta que deje de ampararse en los fueros.

Sin embargo, donde si consigue cobijo Aída es en el Jefe del bloque Cambiemos, el radical Mario Negri.  El cordobés le facilitó la incorporación de la hija de la legisladora que trabajaba bajo la órbita del Ministerio de Interior, y después del caso de la confirmación de su prisión preventiva, le soltaron la mano.

Negri llegó a defenderla públicamente en la televisión…