Rosendo Fraga: “Macri puede tener un 2017 más difícil”

Entrevistado por ExpedientePolitico, el analista hizo un balance del primer año de gestión de Macri. Anticipó la batalla electoral de 2017, las posibilidades del oficialismo atado al despegue de la economía y contó cómo ve al peronismo.

¿Qué balance hace del primer año de gestión de Macri?

Pese a que la alianza oficialista tiene sólo un quinto del Senado, un tercio en Diputados, sólo 5 de 24 gobernadores,- aunque sean importantes,- y carece de base política propia en los sindicatos y los movimientos sociales, el gobierno logró aprobar en el Congreso los proyectos claves para la gobernabilidad. La pregunta central en diciembre del año pasado era si un gobierno no-peronista con esta relación de fuerzas en el sistema político-institucional y el campo social, iba a poder tener gobernabilidad. La respuesta es clara, porque el gobierno de Macri demostró que puede tenerla.

Es así como el primer año de Macri termina con un balance positivo en lo político, pero con señales de que puede venir uno más difícil, donde la elección de medio mandato y que se concrete o no la recuperación de la economía, serán las dos cuestiones claves.

¿Cómo ve al peronismo hoy?

Se consolidó como oposición. A veces dividido en dos, otras en tres y algunos casos,- como sucede con los proyectos sociales,- unido. No tiene liderazgo ni lo tendrá hasta que un peronista llegue a la Presidencia de la Nación y la elección de medio mandato del año próximo, puede generar un candidato presidencial para 2019, pero todavía no un líder.

¿Cómo ve el escenario electoral de 2017? ¿Una derrota del Gobierno podría ser determinante?

A ocho meses de las PASO y a once de las elecciones legislativas, los resultados electorales desde 1983 muestran que la previa a la presidencial, suele anticipar su resultado. Hay una sola excepción: en 2009 el Kirchnerismo fue derrotado, pese a lo cual Cristina fue reelecta en 2011. La excepción fue consecuencia de la fuerte recuperación económica en 2010 y la muerte de Kirchner, que creó un efecto político que favoreció a su viuda que ejercía la Presidencia. Que en seis de siete elecciones, la previa anticipara la presidencial, hace que si Macri gana las legislativas de 2017, la percepción pase a ser que gobernará ocho años hasta 2023. En cambio si es derrotado, la expectativa será que gobernará sólo cuatro. Es en este marco que ganar o perder la elección del año próximo es la prioridad política del oficialismo ya hoy.

Por lo que pone en juego, es claro que el PRO como fuerza política crecerá significativamente en cantidad de bancas, sobre todo en diputados. No será así para el Radicalismo, que renueva gran parte de sus legisladores, con lo cual difícilmente crecerá. Pero ganar o perder la próxima elección, en gran medida será ganar o perder la provincia de Buenos Aires

¿La suerte del Gobierno está sujeta al despegue de la economía?

La economía jugará un rol decisivo en el resultado electoral como sucede generalmente en todo el mundo. En términos simples, cuando la economía crece y el desempleo baja, quien está en el gobierno gana y cuando es la inversa, pierde. Es así como la recuperación de la economía en 2017 es vital para que Cambiemos gane la elección. Que no se haya recuperado en el segundo semestre de este año no es decisivo, pero sí lo es que lo haga entre abril y octubre del año próximo. Por esta razón, la elección le pone tiempos a la recuperación económica y ésta no puede demorarse más allá del segundo trimestre del año próximo. Para que la gente sienta que la economía está creciendo, debería darse el pronóstico del gobierno -que es el supuesto explicito del proyecto de presupuesto 2017- de que el año próximo el PBI crecerá 3,5% y la inflación será de sólo 17%, menos de la mitad que este año.

¿Imagina cambios de cara a las elecciones?

No puede descartarse que entre diciembre y marzo Macri realice cambios en su gabinete,- y no sólo de segundas y terceras líneas,- que le permitan llegar en mejores condiciones a las elecciones del año próximo.