Siguen los pases de facturas por el caso Vicentín: la mayoría apuntan a Claudio Lozano

Se trata del histórico economista de la ATE, quien empujó al presidente a ir por la expropiación. El fallo de Ercolini hizo ruido en la Rosada.

Siguen las secuelas por el costo político pagado ante la mala estrategia en el caso Vicentín, en momentos que se podría repetir la historia con la polémica reforma judicial a debatir por el Congreso.

Días atrás, el juez federal Julián Ercolini emitió un fallo adverso a los intereses del oficialismo, en el delicado caso de puja de intereses con la cerealera. En el intento de recuperar la plata prestada por parte del Banco Nación durante la administración Macri, y a la vez ver que se hace con una compañía estratégica en el mercado de granos que está en pedido de convocatoria, el debate interno abierto en esferas de gobierno es muy significativo para evitar la reiteración de errores no forzados..

El magistrado de Comodoro Py levantó la inhibición de bienes a los directivos de Vicentín argumentando que la investigación, de la supuestas irregularidades de los millonarios créditos firmados por Javier González Fraga, como ex titular del Banco Nación, están recién en una etapa embrionaria sin que se hayan realizado las indagatorias.

Un total de 135 millones de dólares se dilapidaron pero hay que demostrar el dolo y la responsabilidad de los Ceos y funcionarios. Además, existen otros antecedentes de compañías a las que se les brindó parecidos salvatajes en el cierre del macrismo, y en las que no se alumbra la misma discordia.

Al presidente le hicieron ir primero por la expropiación, luego la vía judicial y finalmente por el dejar fluir el desgate económico de la compañía Vicentin. “Que se hundan solos”, afirman. Todas las jugadas a medias y sin timing político, generaron un desgaste innecesario al presidente.

Los pases de factura principales apuntan a Claudio Lozano, uno de los directores del Banco Nación, quien le “vendió” al presidente la idea que entrando al corazón de la polémica de Vicentín se podía complicar judicialmente a Macri.

Los pases de factura principales apuntan a Claudio Lozano, uno de los directores del Banco Nación, quien le  “vendió” al presidente la idea que entrando al corazón de la polémica de Vicentín se podía complicar judicialmente a Macri.

El economista progresista apuntaló su estrategia con dichos de pasillo, sobre que el ex mandatario habría ordenado a Fraga dar los créditos a Vicentín, dibujando la calificación, como un premio por haber sido aportante principal de la campaña.

Esa versión inquietante y verosimil no pudo ser acreditada con pruebas concretas cuando Lozano fue a testimoniar ante Ercolini.

El juez en su fallo lo describe así: “Con respecto al ex presidente Mauricio Macri, de momento no se observan piezas probatorias sólidas que corroboren su intervención”.

Con respecto al ex presidente Mauricio Macri, de momento no se observan piezas probatorias sólidas que corroboren su intervención

A la vez, el fallo apunta: “Consultado el Lic. Lozano dijo que no contaba con mayores precisiones, ni pruebas, mientras que tampoco identificó circunstancias de tiempo y modo y lugar, en los que se habrían cursado las órdenes supuestamente impartidas por Macri”.

El juez dio señales a la Rosada de que no le será fácil demostrar como querellante, a través de la UIF, que existió una maniobra dolosa contra el Estado armada ex profeso.

A priori, salva la responsabilidad de la líneas técnicas del Nación ya que actuaron bajo criterios establecidos en las normas del BCRA”, al dar la luz verde al crédito. “Fue lógico refinanciar la deuda con Vicentín, ya que era una conducta habitual y más aun por tratarse de un cliente con el que la entidad finaciera tenía una larga relación”, dice el fallo.

Por otra parte, hay dudas sobre cómo queda parado Miguel A Pesce, quien enfrió le revisión de los antecedentes de la maniobra macrista en el caso Vicentín. “Lo durmieron terceras líneas heredadas del anterior gobierno”, citó una fuente oficialista.

Toda la saga de equivocaciones es muy representativa de un perfil de presidencia de Alberto que va cazando ideas en el aire, muchas veces de voces poco representativas, lejos de su mesa chica.

Acaso el error original haya sido darle aire, en el loteo de cargos, a Lozano, quien quiso hacer de Vicentín un nuevo Cargill: una empresa pública no estatal, comandada por el propio economista de ATE.