Un año de Macri para el olvido: economía en baja y política fuera de foco

Lo mejor que hizo Macri fue garantizar un G20 sin sobresaltos y un diciembre contenido.

Macri cierra 2018 con un resultado de aplazo, en casi todas las variables económicas y políticas. Sus chances reeleccionistas se mantienen intactas pese a su mala performance como gobernante ya que el fantasma de Cristina lo blinda frente a cierto electorado que no quiere volver atrás.

La variables inflacionarias del año a despedir no se cumplieron. Del 15.7% prometido se termina con un índice superior al 45 % de inflación interanual.

El comienzo del 2019 se proyecta con otra falsedad de “error de cálculo”. Con los aumentos de tarifas anunciados en transporte y energía , las perspectivas inflacionarias del año entrante duplicarán los deseos de la presidencia, elevando el número final a 35 % de los 23 planificados.

Ni hablar del incumplimiento tras la azarosa frase de “pobreza cero”. Según el informe UCA hay más de 1 millón y medio de personas con hambre.

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Los intendentes del PJ se sintieron traicionados con el fair play, ya que dicen que colaboraron para la paz social y pasar un diciembre tranquilo. Macri, de vacaciones en el sur, dio semáforo verde para el anuncio de tarifas que afectará de pleno también al conurbano.

Los primeros dos años de Macri fueron signados por un revés de expectativas. En la economía que parecía que tenía solvencia , fue errático. “El mejor equipo de los últimos 50 años…” quedó en el camino y Nicolás Dujovne junto con Marcos Peña quedaron como los administradores de otra transición traumática.

En cambio, la política, que parece una maldición para los preceptos Duran Barbistas, tuvo en el arranque centralidad y buena comunicación. La nueva política, el cambio con mayúsculas es lo que está por verse.

El desgaste de gestión llegó mucho antes de lo pensado, y al fallar los planes gradualistas y de aceleramiento de las reformas se aterrizó con torniquete devaluatorio en la pista del FMI.

Así los dictados de ir hacia el déficit cero, ir por reformas laborales y previsionales, pasaron a ser auditados por la Señora Lagarde, pasando la argentina a ser el principal deudor del Fondo.

El cuello de botella se provoca en el ingreso a modo de campaña presidencial 2019 . ¿Cómo avanzar casillero en el rumbo planteado como inevitable y a la vez garantizar al reelección de un presidente desgajado?

En política quedan determinaciones fuertes sin resolver. ¿Desdoblar las elecciones de la provincia de Buenos Aires? La jugada impulsada por Vidal y sus máximos colaboradores aun no cierra en al Rosada.

A parte, el músculo político de Macri: Frigerio y Monzó , están alejados del centro de decisiones de poder. La llave de pensar en un proyecto Macri segundo mandato enlazado a sectores “racionales” del peronismo pata garantizar el triunfo en al segunda vuelta, parece haber quedado abortado por el núcleo antiperonista del gobierno.

La pelea con Carrió, ya naturalizada, es un bomba que en cualquier momento puede estallarle en las  manos a los estrategas electorales de Cambiemos.

Si tuviera la estrella de ganar una elección, de por sí que será muy reñida, deberá afrontar un segundo mandato que nunca en la historia de la vida democrática argentina, fueron buenos. Ya se sabe que quien gobierne la argentina en los próximos 4 años lo hará con con consensos muy limitados ya que los números del Congreso será ajustados.

La foto del G2O en Buenos Aires quedó en la vitrina del año que se va como un aspiracional a lo que el presidente pretende que sea el país: orden y consensos mínimos. Aunque sea por un par de días.