Un ex empleado de Jaime admite que compró un departamento y se lo cedió

Un ex empleado de la Secretaría de Transporte durante la gestión de Ricardo Jaime admitió ayer ante la Justicia que intervino en la compra de un lujoso departamento en el barrio de Palermo que terminó a nombre del testaferro del ex funcionario, Manuel Vázquez. Daniel Alvarez Picasso, uno de los procesados en la causa por enriquecimiento ilícito, pidió declarar otra vez ante el juez Sebastián Casanello y contó los detalles de la maniobra, aunque negó tener trato directo con Jaime.
En su nueva declaración, a la que tuvo acceso el diario Clarín, Alvarez Picasso ratificó que ingresó al directorio de la sociedad anónima Clamaran, utilizada para comprar un piso en Figueroa Alcorta al 3000, por pedido de Vázquez. De hecho, fue director de esa sociedad anónima hasta el 30 de noviembre de 2009 y le transfirió la presidencia a Nina Lozeva, que era su pareja por entonces.
Para el juez Casanello, la sociedad fue utilizada para esconder el verdadero dueño del inmueble, Ricardo Jaime.
Según el relato de Alvarez Picasso, Vázquez le pidió que se reuniera con el abogado Alejandro Claps en La Plata para conformar la sociedad. “A los pocos días me dice el Sr. Manuel Vázquez que se iba a comprar un inmueble a través de la sociedad”, declaró el arquitecto que trabajó en la Secretaría de Transporte hasta 2009. Y agregó: “Yo no tenía ni idea en dónde quedaba dicho inmueble. Se iba a hacer con el escribano Allende que era conocido de Vázquez y al poco tiempo me pide que concurra al banco Galicia”.

La operación se hizo en 420 mil dólares. El dinero lo llevó el hijo de Vázquez, Julián, en un bolso, pero lo ingresó al banco el contador. “No hubo demasiadas explicaciones debido a la confianza que me profesaba Vázquez, y por el afecto que yo siento por él preguntaba poco”, dijo ayer Alvarez Picasso. Además contó que accedió porque pensó que el departamento era parte de un proyecto de “puesta en valor de propiedades”, para el cual había sido convocado tiempo antes. Pero la propiedad se le adjudica a Jaime. De hecho, en el departamento donde vivía el ex funcionario se encontraron recibos de expensas de ese inmueble.
Alvarez Picasso relató que ingresó a trabajar en la Secretaría de Transporte en 2003. Poco tiempo después conoció a Vázquez, con quien entabló una “amistad”.
Aunque admitió la maniobra, el arquitecto remarcó ayer que nunca tuvo trato con Jaime, con quien trabajó también a fines de los 80´ en Caleta Olivia. “Jamás supe dónde vivió el ingeniero Jaime, jamás hice un viaje con él, jamás participé de un grupo político junto a Jaime”, remarcó Alvarez Picasso ante el juez en una ampliación de su indagatoria.