Un juez paró una indagatoria para encargar el asadito

Parecía una audiencia más en los tribunales de Comodoro Py. De un lado del escritorio, el acusado de cometer un delito junto con su abogado defensor. Del otro lado, el escritorio el juez federal que le tomaba declaración indagatoria.En plena audiencia, el juez llamó urgente a su despacho a su custodio. El defensor y su acusado se miraron como si algo fuera de lo común hubiese ocurrido y sin entender por qué el juez interrumpió las preguntas para pedir que su custodio se presentara en el despacho.

No tardaron mucho en enterarse los motivos. Cuando  apareció el cistodio, el juez le pidió: “Me va a comprar un kilo de asado a la carnicería y retirar el pedido que hice en la verdulería, y me lo deja en mi vehículo”. Defensor y acusado se miraron nuevamente. No lo podían creer. Se fueron del juzgado si saber si fue un chiste de mal gusto por parte del juez o un recuerdo muy inoportuno.