Una alegría “salvaje”

El empresario de la salud privada, Claudio Belocopitt, tuvo una gran alegría al enterarse que la película Relatos Salvajes salió elegida para competir como mejor film extranjero en  los Oscar. El empresario invirtió el 20% de los 5 millones de dólares que costó la obra de Damián Szifrón. El otro aportante fue Hugo Sigman, dueño de varios laboratorios.