Una pelea para sacar balcones que recién comienza: Lousteau vs Jorge Macri

Proyectan un campo minado. El asunto del descontrol que pueda tener la interna porteña de Cambiemos, preocupa a Larreta.

Esto recién empieza. Al igual que el juicio a Cristina, en términos netamente políticos la interna entre el senador Martín Lousteau y Jorge Macri promete pochoclo doble. Resulta que desde que se incluyó al primo del ex presidente en el gabinete del gobierno porteño surgió un cono de sombras sobre el acuerdo de palabra que tenía Larreta con el radical enrulado. Le había prometido el camino liberado en la ciudad cuando él se fuera a jugar al territorio nacional.

Esto se rompió claramente. El primer obstáculo apareció para el intendente de Vicente López con uso de licencia es sus años de pertenencia en el territorio porteño. Según quiere hacer valer la otra orilla de la interna, Jorge estaría flojo de papeles con respecto a no tener acreditado, al menos, 6 años de domicilio en la ciudad autónoma como señala la Carta magna distrital. ¿Es la ciudad Suiza con respecto a otros distritos marcados por los cambios de domicilios permanentes para acomodar las grillas de las listas de candidatos?

Desde los equipos del Macri aporteñado señalan que “los papeles están en orden”, y todo se trataría del primer carpetazo de una campaña que advierten puede estar teñida de muchos otros golpes bajos. Cuando el funcionario porteño tuvo facultades en el BAPRO, debió fijar domicilio en CABA.

Hay chicos malos de arranque en ambos bandos. El diputado Emiliano Yacobbiti es el artífice de un armado de convivencia con el Larretismo donde algunas áreas de gobierno son manejadas por los ex ECO. El sucesor de Coti tiene importante influencias en estratégicos estamentos del poder en la ciudad.

La inclusión en el campo de batalla de la ciudad de Jorge Macri fue por pedido de Mauricio y Larreta cedió entendiendo también que le daría otro volumen político a su gabinete  en estos tiempos de otros desafíos.  Así fue que el pretendiente del trono porteño fustigó con fuerza al kirchnerismo, agregándole una pisca de “halconismo” a la moderación.

“Está bueno que Mauricio lo apoye a su primo”, dicen con jactancia desde la cercanía de Martín. Agrega la fuente que “hay madurez entre nosotros”, apostando a que si quieren ser alternativa en todos los frentes deberían tener un colchón de mínimos acuerdos de no agresión.

Esperan desde la UCR porteña que Larreta cumpla su palabra y no se meta en la interna. Entienden que Jorge Macri entró al gobierno para reacomodar la interna en la provincia de Buenos Aires, cuestión que puede ser relativizada a consideración de algunos escarceos.

Otro interrogante por delante será si se llegase a eliminar las PASO nacionales cómo repercutirá en la discusión por el premio mayor de la sede de Uspallata. Con tres posibles candidatos a presidentes, indudablemente, cabría pensar en que un acuerdo macro sentaría las bases de evitar una sangría en las listas de la ciudad. Mientras, el pochoclo está servido.